Logistics Living Lab es un proyecto que ha nacido en Reino Unido y que tiene objetivo reducir las emisiones de los camiones a partir de mejorar la eficiencia del sistema de transportes del país. En este sentido, una de las primeras ideas del proyecto es limitar el número de camiones vacíos en las carreteras de Reino Unido, ya que este es uno de los grandes problemas del sector. De hecho, según datos del Gobierno, el 25% de los camiones presentes en el país circulan de manera habitual en vacío.

El transporte de mercancías por carretera produjo un total de 11,5 millones de toneladas métricas de emisiones de CO2 en 2020. Entre una cuarta y una quinta parte de esta cifra se atribuye a vehículos pesados de transporte que circulaban en vacío, por lo que este proyecto busca aprovechar las posibilidades que ofrece la tecnología de contabilidad distribuida y el internet de las cosas para reducir el número de vehículos que a lo largo de cada día ruedan en vacío en Reino Unido.

En este sentido, los responsables del proyecto buscan desarrollar una infraestructura digital compartida para una gestión más inteligente del llenado y circulación de los camiones, lo que permitirá un mayor seguimiento de los vehículos, la operabilidad de los mismos e incluso la opción de compartir camiones en un concepto novedoso de flotas colectivas sin que las partes implicadas en el transporte tengan porque disponer del control total o visibilidad de todos los datos de la empresa con la que comparte el vehículo.

Aunque todas estas ideas son muy complejas de trasladar a la práctica, lo que está claro es que su aplicación permitiría una cadena de suministro en Reino Unido más eficiente, resistente y sostenible. Al final, la adopción de tecnologías digitales avanzadas en la cadena de suministro es uno de los pasos a tomar para mejorar la eficiencia del sector y, por extensión, reducir las emisiones de CO2 de los vehículos que participan en todo el proceso.