Los datos recogidos por la consulta DBK en su último estudio sobre el sector del transporte de mercancías por carretera demuestran que la actividad ha recuperado los niveles prepandemia. Cumpliendo los pronósticos elaborados en junio de 2021, el sector del transporte rodado ha alcanzado el volumen de negocio registrado antes de la aparición de la pandemia de COVID-19, en una clara muestra de la resiliencia de uno de los sectores que ha sido más golpeados por los efectos de la crisis sanitaria.

De hecho, el sector del transporte de mercancías por carretera no sólo ha alcanzado las cifras de 2019, sino que tiene una previsión de crecimiento bastante destacada para 2022, sin duda alimentada por los niveles de demanda inéditos que se registran desde el sector industrial. Un escenario que, pese a todo, se dibuja bastante complejo por la escasez de conductores, lo que crea un equilibrio desigual entre la demanda de servicios de transporte y la propia oferta que mantienen las empresas del sector.

En este aspecto, el estudio de DBK demuestra que la actividad en el sector del transporte de mercancías por carretera en España descendió poco más del 5% en 2020 respecto a 2019, mientras que en 2021 se ha registrado un crecimiento del 7% en comparación con el ejercicio anterior. Datos en los que el crecimiento del comercio electrónico y las nuevas dinámicas de consumo han tenido mucho que ver. Por el contrario, las restricciones de movilidad y del comercio exterior han provocado que el transporte internacional haya mantenido cierta evolución negativa.

De cara a 2022, el transporte nacional se enfrenta a una fuerte presión, tanto por el enorme crecimiento de la demanda como por el difícil equilibrio que deben mantener las empresas para mantener la rentabilidad. El crecimiento del precio de los carburantes y de la mano de obra llevan a las empresas a tener muy poco margen de maniobra, problema derivado de la escasez de conductores que según Transport Intelligence en Europa alcanza cifras preocupantes, ya que son necesarios más de 400.000 conductores profesionales adicionales.