El sector del transporte de mercancías por carretera está en continuo cambio, más ahora con la necesidad de adaptarse a las nuevas exigencias y retos que plantea la pandemia de COVID-19. Una crisis sanitaria que ha llevado al transporte al límite, pero que también ha ayudado a dar un paso adelante en la digitalización del sector. El objetivo sigue siendo que la relación entre los transportistas y sus clientes, desde la toma de pedidos hasta la facturación, sea 100% digital. Y hay empresas que lo están logrando.
La digitalización en las relaciones entre clientes y compañías de transporte de mercancías por carretera está creciendo de forma notable. Aunque las empresas hasta ahora daban prioridad a la digitalización de funciones comerciales como la geolocalización (83%) de sus vehículos o el registro del tiempo de actividad (80%), cada vez son más las compañías que usan los recursos informáticos y digitales para la interactuación con el cliente en todas las áreas y a todos los niveles, desde la recepción de los pedidos hasta la facturación del servicio.
Si bien este proceso de digitalización está vinculado a las grandes compañías de transporte y no tanto a los autónomos y pymes, hay datos que reflejan el claro avance en esta materia. De hecho, entre el 15 y el 20% de los flujos comerciales de compañías como el grupo Premat -más de 600 empleados y 70 millones de facturación en 2019- se desmaterializan al 100%. Esto se traduce en que todas y cada una de las transacciones se realizan de forma digital, integrando por último la firma electrónica del albarán de entrega.
Compañías de este perfil tienen todas las herramientas informáticas necesarias para que todo el intercambio de información con el cliente sea digital y con una trazabilidad cómoda para ambas partes. Dentro del objetivo de convertir el transporte de mercancías por carretera en una actividad con una huella neutra de carbono, eliminar el uso de toneladas de papel con la digitalización de todos los procesos. Además, la digitalización permite facturar la operación de forma más eficiente y se limite la sobrecarga de información y errores humanos.