Un principio de acuerdo entre el anterior Gobierno y el Generalitat de Cataluña plantea la obligación de que los camiones circulen obligatoriamente por la autopista de peaje AP-7.
Sin haber tomado aún posesión de su cargo el nuevo Director General de Tráfico, su Departamento ha elaborado un nuevo proyecto de Resolución por el que establece la prohibición absoluta de que los camiones pesados (4 o más ejes) puedan circular por la N-340 a su paso por la provincia de Castellón, desde la localidad de Peñíscola hasta el límite provincial con Tarragona, obligándoles en consecuencia a circular por la autopista de peaje AP-7.
Dicha prohibición es consecuencia de las negociaciones mantenidas entre el anterior Gobierno central y la Generalitat de Cataluña para mejorar la seguridad vial en la citada N-340 a su paso por las provincias de Castellón y Tarragona, lo que obligará a que el Servicio de Tránsito de Cataluña apruebe una restricción similar en el recorrido por dicha provincia catalana, así como a acordar con la concesionaria de la autopista el establecimiento de bonificaciones a los transportistas que obligatoriamente transiten por la AP-7.
FENADISMER sigue insistiendo en su rechazo absoluto a la política de prohibición absoluta de circulación de los camiones en las carreteras nacionales, ya que ello supone inculpar al sector del transporte por carretera como único responsable de los posibles accidentes que se producen en las carreteras, lo que es absolutamente incierto conforme a los datos estadísticos de siniestralidad vial que anualmente publica la Direccion General de Tráfico.
Por ello, FENADISMER insiste en la necesidad de implementar medidas que reduzcan las causas que motivan los accidentes de tráfico en las carreteras y que fomenten el uso voluntario de las autopistas de peaje, entre otras, reduciendo la velocidad máxima de las carreteras nacionales en los puntos más peligrosos y estableciendo un tercer carril en determinados tramos para favorecer los adelantamientos, e incrementar la velocidad máxima permitida en las autopistas de peaje, aplicando asimismo un programa de descuentos para hacer más atractiva su utilización.
Pero es que además sorprendentemente dicha medida contrasta con el anuncio realizado por el actual Ministro de Fomento hace unas semanas en la que anunciaba la gratuidad de la autopista de peaje AP-7 una vez venza su actual concesión a finales de 2019, por lo que la restricción a camiones propuesta por la DGT resulta contradictoria con la política de liberación de peajes que propugna el Ministerio de Fomento.
Por ello, FENADISMER va exigir que el nuevo proyecto de desvío obligatorio de la N-340 no se tramite, y en su lugar se ponga en marcha a la mayor brevedad el nuevo Plan de desvío voluntario de camiones a las autopistas de peaje, que ha sido recogido en la Ley de Presupuestos del Estado para 2018, y dotado con un presupuesto de 45 millones de euros, con el objetivo de promocionar con carácter voluntario el uso de las autopistas de peaje por parte de los transportistas, entre otras la AP-7,por las indudables ventajas que dichos planes comportan para la descongestión de las carreteras nacionales y la mejora de la seguridad vial.