España ha dado un paso de gigante para dignificar la profesión de conductor de camión con la prohibición de su participación en las tareas de carga y descarga. Sin embargo, esta medida no debe quedar sujeta al territorio español y debe extenderse a toda la Unión Europea bajo unos mismos criterios. Esta semana se celebra en Madrid una reunión con los grandes sindicatos nacionales y europeos para empujar todos en la misma dirección con el objetivo de prohibir la carga y descarga para los conductores en todo el territorio comunitario.
La prohibición de la carga y descarga para los conductores profesionales que ha entrado en vigor a principios de septiembre es una cuestión que trasciende incluso al ámbito laboral. Por ese motivo, el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC) ha empujado hasta el final para que esta prohibición incluida en la Ley de Ordenación del Transporte Terrestre (LOTT) se redactarse de tal forma que cubriera a todos los chóferes, independientemente de que sean conductores autónomos o asalariados, españoles o extranjeros.
La inclusión en el LOTT y no en la Ley de Contrato de Transporte o en el Acuerdo General de Mercancías impide que haya caminos alternativos para sortear esta prohibición, ya que en estos casos podrían haber quedado fuera de la prohibición los conductores autónomos. Una situación que dejaría desprotegido a este colectivo, pero que también les hubiera dado una gran ventaja competitiva ya que los cargadores hubieran apostado por contratar a estos conductores para ahorrarse las nóminas de trabajadores especializados en la carga y descarga.
Con todo, el gran problema de la redacción de la ley que prohíbe la carga y descarga está en la territorialidad del ordenamiento jurídico español y su aplicación fuera de las fronteras del país. En este contexto, Astic y ATFRIE están empujando para que esta prohibición se plasme a nivel europeo y para ello quieren contar con el apoyo de IRU, ETF, Comisiones Obreras y UGT, entre otros sindicatos. Para intentar unir posturas, este martes 20 de septiembre hay una reunión en Madrid de todas las partes para intentar que la prohibición de carga y descarga para los chóferes tenga un carácter general en Europa.