No es un secreto que el desarrollo de las infraestructuras asociadas al transporte no sigue una dinámica lineal y paralela en todas las Comunidades Autónomas, existiendo de hecho grandes desigualdades. En este sentido, una de las regiones con una infraestructura más imitadas es La Rioja, tal y como denuncian desde CETM La Rioja, principal asociación del sector en la región. La entidad estima que esta situación lastra las posibilidades de crecimiento, tanto del sector transporte riojano como de la propia economía de la Comunidad.

En este sentido, CETM La Rioja critica con dureza los planes de infraestructura y transporte del Gobierno autonómico, ya que considera que incluso son negativos para la actividad y lastran de forma clara el desarrollo económico de la región, tanto en el transporte como a nivel social e industrial. En esta línea, CETM La Rioja considera que el Gobierno de la región está llevando a la comunidad autónoma a una situación de marginación total. De hecho, cataloga la actitud actual de involución, retroceso y desidia.

La patronal riojana del transporte defiende que «las iniciativas que han sido anunciadas por parte del Gobierno lo único que van a conseguir es aumentar exponencialmente el abandono histórico que sufre la región, abocando a corto plazo a La Rioja a un ostracismo total en materia económica y social. No se puede entender que el Gobierno deseche la construcción de autovías regionales hasta 2030, ya que es una decisión que es sinónimo de involución por parte de la Administración para con el conjunto de la sociedad riojana».

De igual forma, desde CETM La Rioja tampoco se entiende como el Gobierno de la región no deja de insistir en su idea de mantener la N-232 con el tráfico restringido a los vehículos pesados de transporte, ya que esta medida lo único que hace es «lastrar el desarrollo económico de la región, obstruyendo la eficiencia de las empresas de transporte y dificultando el trabajo de los profesionales del sector, lo que afecta a otras áreas de la economía regional».