El constante y disparatado aumento del precio del combustible ahoga al sector del transporte de mercancías por carretera. Incluso con el sistema de bonificaciones de 20 céntimos por litro aprobado por el Gobierno, los conductores autónomos y empresas de transporte no pueden sobrevivir. De nada sirve ayudar con 20 céntimos por litro si el precio del Diésel no deja de crecer. Por este motivo, los representantes del sector transporte piden cambios a un modelo de bonificación que, además, debe prolongarse más allá del 30 de junio.
En este sentido, el transporte pide que el actual sistema de bonificaciones y subvenciones que se aprobó en abril se amplíe hasta el 31 de diciembre, ya que el precio del Diésel no deja de aumentar y alcanza un importe medio de 1,911 euros por litro -sin la aplicación de esta ayuda-, mientras que la gasolina registra ya un precio medio de 1,878 euros. El aumento del valor del Diésel es del 29,2% desde el estallido de la guerra de Ucrania, por el 18% de la gasolina. La diferencia de precio entre ambos combustibles ya es superior a los tres céntimos.
El sector no sólo necesita que esta línea de ayudas se prolongue hasta diciembre, sino que pide también la prórroga en el sistema de devoluciones del Gasóleo Profesional que se utiliza en la actualidad. Cabe recordar que los transportistas liquidan los 4,9 céntimos por litro de Diésel de forma mensual en lugar de trimestral, recibiendo el reintegro del mismo cada mes. Medida que también termina el 30 de junio y que debe ser prolongada para asegurar la supervivencia del sector.
Para el correcto funcionamiento de estas subvenciones es prioritario que el Gobierno pague de forma más rápida y efectiva el importe adelantado por las estaciones de servicio, toda vez que las empresas y autónomos que hay detrás de las mismas también están agonizando. Desde Moncloa se asegura que el 60% de las solicitudes presentadas por los operadores han sido respondidas, como también ha confirmado el inicio de pago de las ayudas directas al sector transporte por vehículo. Sin embargo, todavía hace falta algo más para que el sector pueda gozar de cierta salud.