La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) señala que en España hay más de 300.000 falsos autónomos. Una cifra en la que el sector transporte tiene mucho que ver, ya que se trata de una actividad en los que más se usa esta figura. Pese a todo, desde UPTA se señala que no se trata de un mal específico de sectores como el transporte, sino que los falsos autónomos operan en todas las familias profesionales. Una circunstancia que denuncian desde la asociación.
En este sentido, UPTA indica que detrás del crecimiento del número de trabajadores afiliados al régimen de autónomos en algunos sectores no se está dando tanto porque esta opción sea la elegida por estas personas y sí por el elevado volumen de subcontratación de servicios profesionales que las empresas solicitan a supuestos autónomos que, a su juicio, trabajan en condiciones de laboralidad. Una situación que se produce que se está extendiendo, pero que se da con mayor frecuencia en actividades concretas.
La organización de autónomos estima que las contrataciones a personas como autónomos en condiciones de laboralidad real se produce en algunas actividades por encima del conjunto de todas las familias profesionales. Una circunstancia que se produce por ejemplo en el sector de las clínicas sanitarias y despachos profesionales, pero también en la docencia o el periodismo. También está entre los sectores con más falsos autónomos la construcción, así como todas las actividades relacionadas con el transporte.
Por este motivo, UPTA ha señalado: «El pasotismo absoluto de algunos colegios profesionales que son conocedores y consentidores de esta ilegalidad contractual dibuja un escenario difícil en el que también son corresponsables. Existen mecanismo para desenmascarar de forma rápida y sencilla a aquellos empresarios que buscan ahorrar las cotizaciones sociales tan importantes para poder mantener el estado de bienestar actual».