El sector del transporte por carretera en España, como sucede en gran parte del mundo, tiene un importante déficit de conductores profesionales de camión y autobús. En lo referente al transporte de mercancías por carretera, la falta de chóferes profesionales está provocando que miles de empresas tengan problemas para cerrar sus operativas. Una circunstancia que hay que atajar con premura desde distintas áreas, potenciando el acceso a la profesión, mejorando las condiciones laborales y sociales y facilitando también la llegada de talento extranjero.
En este último apartado, el Reino de España y el Reino de Marruecos han llegado hace pocas fechas a un acuerdo para la convalidación de los carnets profesionales obtenidos en el país contrario. De esta forma, el carnet de camión o autobús obtenido en España será válido para desempeñar la tarea de conductor profesional en Marruecos, de igual forma que los permisos obtenidos en Marruecos serán válidos para conducir camiones en territorio español. Una cuestión que todavía está por formalizarse, en cualquier caso.
Aunque es evidente que esta medida aliviará en parte el problema de escases de chóferes y la dificultad que tiene el sector para dar un relevo generacional a la cada vez más envejecida plantilla de conductores profesionales, lo cierto es que esta medida genera algunas dudas. Los datos son claros, España necesita en torno a 26.000 nuevos conductores profesionales a corto plazo, pero esta necesidad va a ser incluso mayor en un plazo de cinco o diez años, cuando un alto porcentaje de los actuales conductores se jubilen.
En este sentido, el acuerdo entre España y Marruecos se puede entender desde dos primas. El primero es que es algo beneficioso ya que permitirá incorporar conductores marroquíes a las operativas de las empresas españolas sin que los chóferes tengan que canjear o convalidar su carnet. El segundo es que esto puede provocar una precarización de la profesión con la llegada de conductores que no estén preparados acorde a los estándares europeos -tal y como denuncia la Confederación Nacional de Autoescuelas- o que estos conductores reciban unas condiciones salariales y laborales peores que los chóferes locales.