El sector del transporte de mercancías por carretera no levanta cabeza. Los graves efectos de la pandemia de COVID-19 todavía se hacen notar, sin que la recuperación de la actividad esté alcanzando las cotas previstas. Una situación que se debe entre otras cosas al salvaje aumento del precio del Diésel. Aunque desde el primer trimestre de 2021 es palpable la recuperación de la actividad dentro del sector, las ocho semanas consecutivas de aumento en el precio del gasóleo suponen un nuevo dolor de cabeza para el transporte.
El precio del combustible mantiene una tendencia alcista desde el inicio de 2021. De hecho, durante el primer trimestre la partida presupuestaria de las empresas de transporte dedicada al combustible creció un 7,7%. Un porcentaje que incluso será mayor en el segundo trimestre una vez que se consoliden los datos que recoge el Observatorio de costes, precios y actividad del transporte de mercancías por carretera. Con todo, se dibuja una evidencia y es que el incremento de los precios del combustible está lastrando la recuperación del sector.
A falta de los datos del segundo trimestre, la partida de combustible supone un 28,1% del total de la estructura de costes de las empresas de transporte. Si bien es cierto que la partida que se destina al personal y dietas sigue siendo superior -34,8% del total de los costes-, el precio del Diésel se ha convertido en la causa del importante aumento de los costes de explotación del transporte de mercancías por carretera en el primer trimestre de 2021, incremento de hasta el 94% en algunos casos.
Como consecuencia, el coste unitario por kilómetro para un vehículo de carga general se ha incrementado hasta los 1,09 euros, cifra que supone un ascenso medio de los costes de un 2,4% para este tipo de vehículos, del 2,6% para los vehículos articulados frigoríficos y del 0,9% para las furgonetas. Unas cifras que no se corresponden en muchos casos con los precios de los servicios de transporte, ya que han sufrido una caída del 0,3% en el primer trimestre, si bien existe un aumento del 0,7% para transportes de larga distancia dentro de un escenario de cierta recuperación de la actividad -4,4% de media y 6,2% en transporte internacional-.