El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana llevó a cabo una modificación del Reglamento de Ordenación del Transporte Terrestre (ROTT) para crear un régimen armonizado con el que obtener el título de competencia profesional de transportistas y operador de transporte. Un movimiento vital, ya que al final es el único requisito de acceso al sector tras la eliminación del requisito de flota mínima y del requisito de antigüedad. Sin embargo, la norma tenía una ‘zona gris’ que ha impedido su total aplicación hasta ahora.

El texto que definía el nuevo régimen armonizado establecido en el ROTT en 2019 no tenía en cuenta la forma de puntuar los exámenes en caso de que el aspirante contestara de forma equivocada las preguntas del examen, lo que posibilitaba que se pudiera aprobar el examen por puro azar. Corregido este punto, los exámenes tendrán 200 preguntas tipo test -con cuatro respuestas posibles- y 8 casos prácticos, con el matiz de que las respuestas negativas restarán un tercio de la nota de cada pregunta. Y así será a nivel general en los exámenes de cada Comunidad Autónoma.

Con un sistema justo y verdaderamente armonizado que dibuja la misma exigencia formativa en cualquier punto de España, gracias a la confección de los exámenes a partir de la aplicación informática dependiente del Ministerio de Transporte, se acaba con las desigualdades que se daban entre Comunidades Autónomas. Y es que al evitar que la confección de las preguntas se lleve a cabo por los organismos regionales se evita los aprobados masivos que se daban en algunas autonomías. Además, también se cambia el modelo de convocatorias para facilitar las opciones de los aspirantes.

De hecho, los primeros exámenes bajo la nueva normativa armonizada que dibuja el ROTT tras la modificación del texto aprobado en 2019 se llevarán a cabo en las próximas fechas, ya que los exámenes para obtener el título de competencia profesional de transportistas y operador de transporte no tendrán una convocatoria de fecha fija, sino que los aspirantes podrán elegir fecha. Se acaba así con el modelo anterior que obligaba a todos los aspirantes a acudir a realizar el examen en una o dos fechas concretas a lo largo del año.