La Dirección General de Tráfico (DGT) ha incluido cambios en el Reglamento General de Conductores que afectan al permiso B de circulación. Con esta modificación, los poseedores de un permiso B están habilitados a conducir un vehículo de más de 3.500 kilogramos de Masa Máxima Autorizada (MMA), siempre y cuando estén propulsados por energías alternativas. De esta forma, la MMA para vehículos de combustión convencionales se mantiene en 3.500 kg, mientras que en el caso de vehículos electrificados o con sistemas de gas la MMA aumenta hasta los 4.250 kilogramos.

Hasta ahora cualquier usuario que tuviera la intención de conducir un vehículo con una MMA superior a los 3.500 kilogramos necesitaba de manera obligatoria el permiso de conducción C. Una afirmación que ahora queda matizada por la DGT, ya que en su último cambio normativo permitirá conducir vehículos propulsados por energías alternativas de hasta 4.250 kilogramos con el permiso B, es decir, el de turismos. Este matiz se aplica, según la DGT, con el objetivo de compensar el peso adicional que tienen los sistemas eléctricos -baterias- o de gas -depósito de GNC o GLP-.

De esta forma, el aumento de la MMA de los vehículos que se pueden conducir con el permiso B no es de carácter general y sólo se aplicará a aquellas furgonetas o vehículos de transporte electrificados o que utilicen energías alternativas para compensar el citado exceso de peso. Este cambio normativo está en línea con el ya aprobado anteriormente por la DGT que aumentaba la MMA de los vehículos eléctricos o propulsados por hidrógeno, GNC y GLP en una tonelada sin que su clasificación sufriera alteración alguna.

Francisco Aranda, presidente de la Organización Empresarial de Logística y Transporte (UNO), ha explicado que este cambio supone «una decisión fundamental para incentivar el uso de vehículos ecológicos en el sector transporte. No obstante, se materializa la compensación de peso que evita la obtención del permiso de conducir C para los vehículos ecológicos que por el peso de sus baterías o tanques superan los 3.500 kilogramos. Sin duda, se trata de una medida que armoniza la normativa y que supone un incentivo para las empresa de logística y paquetería para realizar una transición de furgonetas tradicionales a este tipo de vehículos».