Desde el 1 de enero de 2019, los nuevos camiones pesados fabricados dentro de la Unión Europea deberán ir acompañados de una declaración que muestre el consumo de combustible y las emisiones de CO2.
El objetivo es facilitar que los compradores de camiones elijan vehículos eficientes desde el punto de vista energético con un menor impacto climático, lo que reduce las emisiones generadas por el tráfico de camiones. Volvo Trucks considera que los nuevos requisitos son una buena incorporación a las herramientas con las que la industria ya está trabajando.
“Las declaraciones proporcionarán a nuestros clientes información fácil de entender y comparable sobre el consumo de combustible y las emisiones de CO2 que proporcionará orientación sobre la elección del camión,” declara Lars Mårtensson, Director de Medio Ambiente e Innovación de Volvo Trucks.
“Sin embargo, lo más importante es que ahora hay un enfoque aún mayor en la eficiencia energética y el impacto climático. Este es un tema clave para la industria de la automoción, el sector del transporte y la sociedad en general.”
Según el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU, el tráfico pesado representa alrededor del 6% las emisiones globales de gases de efecto invernadero, y el sector depende en gran medida de los combustibles fósiles.
“Por lo tanto, esperamos que los nuevos requisitos de declaración también se complementen con incentivos económicos que hagan rentable para las empresas de transporte reemplazar los vehículos más antiguos por camiones nuevos y más eficientes en el consumo de energía con menores emisiones de CO2,” afirma Lars Mårtensson.
Actualmente no hay decisiones sobre impuestos o incentivos asociados con los nuevos requisitos de declaración. Sin embargo, en el escenario de la Unión Europea «Estrategia europea para la movilidad de bajas emisiones», se supone que las emisiones de CO2 del tráfico de camiones disminuirán en un promedio del 1,5% anual hasta 2030.