La atención en torno a la aprobación por parte del Parlamento Europeo de la normativa que define los objetivos ampliados de emisiones de CO2 para el transporte pesado se ha centrado en torno a las cifras que marca el nuevo texto, pero lo cierto es que el reglamento tiene más miga. De hecho, la nueva normativa europea en materia de emisiones de CO2 para camiones nuevos abre la puerta al uso de combustibles sintéticos (e-fuels), incluso si a partir de 2035 se prohibirá de facto la venta de camiones propulsados por motores Diésel.

Y aquí está la cuestión, porque el Parlamento Europeo prohibirá la venta de camiones Diésel, pero no de aquellos que utilizando la tecnología y motorizaciones Diésel puedan utilizar los referidos combustibles sintéticos. En este sentido, FENADISMER y la asociación europea UETR seguirán empujando para que las instituciones europeas y nacionales apuesten de una forma todavía más clara por la flexibilidad tecnológica dentro de la transición ecológica del sector transporte, algo que pasa entre otras cosas por el uso de biocombustibles sintéticos y/o otras opciones como el HVO (Aceite Vegetal Hidrotratado).

Desde ambas asociaciones señalan que es importante lograr el objetivo de descarbonización basado en la neutralidad tecnológica y la combinación energética, sin limitarse a tecnologías o fuentes de energía específicas como se pretende desde algunos ámbitos. De hecho, se debe promover y facilitar el uso de otras fuentes de energía, como son los combustibles sintéticos o los ecocombustibles, con la ventaja que son compatibles con los motores de combustión y con la red de suministro actualmente existente.

Cabe recordar que el Pleno del Parlamento Europeo ha aprobado esta propuesta de objetivos ampliados para reducir las emisiones de CO2 del transporte pesado que, aunque tiene que ser todavía ratificada por el Consejo Europeo, parece que va camino de su aprobación definitiva. El texto marca que los vehículos pesados nuevos deberán reducir sus emisiones de CO2 en un 45% en 2030, en un 65% antes de 2035 y en un 90% a partir del año 2040.