El Pleno del Parlamento de Andalucía ha instado este jueves a la Junta de solicite al Gobierno central que reconsidere cualquier intención de implantar peajes en las autovías andaluzas. Se trata de la única forma que tiene el Parlamento andaluz de solicitar información precisa sobre las medidas de implantación de peajes en las vías de alta capacidad que se hayan podido acordar con la Unión Europea y los efectos que tendrán estas medidas, además de mostrar su postura contraria a cualquier modelo de pago por uso que afecte a las carreteras de la región.

El Partido Popular ha sido la fuerza política que ha puesto en marcha esta proposición no de ley, que ha sido apoyada por VOX y que ha contado con el rechazo del PSOE por Andalucía. En este sentido, el diputado popular Antonio Saldaña ha remarcado durante el Pleno que, pese a que Pedro Sánchez se ha comprometido con la Unión Europea a aplicar esta medida dentro del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, siempre que es preguntado por esta cuestión niega que se vaya a materializar.

El mencionado diputado considera que se trata de una nueva mentira del Gobierno central, ya que en la página 127 del documento remitido a Bruselas se habla de desarrollar un sistema de pago por uso de la red de vías de alta capacidad que permite cubrir los costes derivados de su mantenimiento. A su vez, explica que, de hacerse esa medida, los andaluces volverán a sufrir un nuevo impuesto por la circulación. Un impuesto que afectará a las ocho provincias andaluzas y a la práctica totalidad de sus ciudadanos, pese a ser una región con un importante déficit de inversión histórica en infraestructuras.

Como es lógico, esta propuesta ha dejado claro el posicionamiento de cada grupo político, alineadas con los dos bloques políticos del país. Sea como fuere, la realidad es que el pago por uso de las autovías promete ser una cuestión realmente compleja, tanto para los usuarios en general como para el transporte de mercancías por carretera. Un sector clave para la economía española que ya paga, más que de sobra, para el mantenimiento de la infraestructura viaria.