El Paquete de Movilidad aprobado por la Unión Europea y publicado en su Diario Oficial el 31 de julio define un periodo transitorio hasta diciembre de 2024 para que los transportistas y empresas del sector sustituyan los actuales tacógrafos analógicos y digitales por los nuevos tacógrafos inteligentes de segunda generación. Una medida que afecta en España a unos 440.000 vehículos de transporte de mercancías, ya que un 20% de estos vehículos utilizan aún tacógrafos analógicos y el 80% restante tacógrafos digitales.

Cabe recordar que el Paquete de Movilidad recoge en su texto que el tacógrafo inteligente de segunda generación permitirá registrar de forma más precisa la posición y labor que realizan los conductores profesionales con el fin de controlar los tiempos de conducción y descanso, ya que permitirá vigilar la deslocalización de los chóferes en el transporte internacional y las nuevas limitaciones de cabotaje. Para tal fin, este tipo de tacógrafo registra el lugar donde se inicia el trabajo diario, los cruces de fronteras, las labores de carga y descarga, el seguimiento de la conducción acumulada y el lugar de finalización del periodo de trabajo diario.

Con esto en mente, dentro del periodo de transición que se extiende hasta 2024 y que estipula que también los vehículos ligeros deberán equipar este tacógrafo inteligente a partir de 2026, existen distintas fechas a marcar en rojo. Teniendo en cuenta que la Comisión Europea tiene 12 meses para definir las especificaciones técnicas del tacógrafo -máximo agosto de 2021- y hay dos años para su implementación, todos los vehículos de transporte matriculados a partir de agosto de 2023 -como muy tarde- deberán equipar este tacógrafo.

Sea agosto de 2023 o meses antes esta fecha límite, desde ese punto habrá un periodo de transición para los vehículos en activo. Para los vehículos con tacógrafos analógicos o digitales no inteligentes -anteriores al 15 de junio de 2019- se obliga a su sustitución por un tacógrafo de segunda generación antes de diciembre de 2024. Los vehículos que lleven un tacógrafo digital de primera generación deberán sustituirlo antes de agosto de 2025. Por su parte, los vehículos ligeros de 2,5 a 3,5 toneladas de MMA, actualmente exentos de usarlo, deberán instalarlo antes de julio de 2026 para el transporte internacional y, con casi toda seguridad, también para el transporte nacional.