2020 entra en su recta final, momento de hacer balance de un ejercicio marcado por la crisis económica asociada a la pandemia de COVID-19. En un escenario del todo inesperado para el sector del transporte de mercancías por carretera, las empresas y profesionales autónomos han demostrado una gran resiliencia y han dejado patente que formar parte de una actividad esencial para la sociedad. Sin embargo, eso no afecta que el transporte haya sufrido un duro revés en un marco en el que la pandemia ha alterado el esquema de costes y precios dentro del sector.
Así ha quedado patente en los últimos Observatorios de costes, precios y actividad dentro del transporte de mercancías por carretera correspondientes al tercer trimestre de 2020, justo después de acabar el Estado de Alarma por la pandemia de COVID-19 y la peor fase de la crisis sanitaria. En concreto, durante el periodo referido el precio el coste unitario por kilómetro para un vehículo articulado de carga general se ha establecido en 1,04 euros por kilómetro, lo que supone un incremento de los costes en un 0,1%.
Si bien el precio del coste unitario por kilómetro sí se ha reducido en un 0,1% para vehículos articulados frigoríficos, este ligero aumento en los costes de operación se entiende desde la subida del 2,2% en los costes del personal, incluso si el precio del carburante ha caído un 2,9% a lo largo del trimestre. Aunque es cierto que la partida presupuestaria ha perdido peso en la estructura de costes hasta ser el 25,2% de los costes totales de producción, el gasto destinado a personal y dietas ha crecido hasta el 36,4% del total.
A esta dinámica dentro de los costes particulares de las empresas hay que sumar la variación en los precios y tipos de servicios de transporte según su la distancia de actividad. En este aspecto, hay que tener en cuenta que durante el tercer trimestre se han incrementado los servicios de corto recorrido en un 4,4% a costa de reducir los servicios de media distancia (-2,1%) y de larga distancia (-0,6%), todo en un escenario en el que se han trasportado un 3,5% toneladas menos que en el ejercicio anterior.