El consejero de Cohesión Territorial del Gobierno de Navarra, Óscar Chivite, explicó que la empresa pública Nafarbide trabajaba en la puesta en marcha de los peajes para vehículos pesados en cinco vías de alta capacidad de la comunidad foral de manera progresiva a partir de 2026. En concreto, el sistema se implantaría comenzando por la A-1 desde el próximo año.

Según indicó el consejero, “Nafarbide continuaba trabajando en la implantación de los peajes, que era un tema administrativamente complejo, ya que se debía crear una infraestructura adecuada”. “En ese momento, se trabajaba en los pliegos para licitar lo que sería el centro de control y los pórticos que se instalarían en la A-1, con la previsión de que en 2026 pudieran estar operativos”, explicó. El centro de control se ubicaría en el edificio Iturrondo en Villava.

El consejero señaló que se había trabajado con el sector del transporte para definir el sistema de facturación, ya que era una de sus principales preocupaciones, especialmente en lo referente al conocimiento inmediato de los costos de circulación. “Nos solicitaron que la facturación fuera inmediata, de modo que pudieran conocer al instante cuánto les había costado el peaje para repercutirlo a sus clientes. Además de esto, la relación con ellos era habitual, el compromiso del Gobierno con el sector del transporte era continuo, existían ayudas para los nuevos conductores y manteníamos una escucha activa con ellos”, aseguró.

Por otro lado, Chivite afirmó que “se debía tener en cuenta que prácticamente el 90% de los vehículos que transitaban por estas vías donde se iban a instalar peajes eran vehículos pesados en tránsito. Se estimaba que la medida afectaría más a los vehículos que conectaban las mercancías de España con Europa que a los residentes en Navarra”.