Una operación conjunta de inspección entre ROADPOL y la Autoridad Europea del Trabajo (ELA) en varios países de la UE ha identificado 208 infracciones en el sector del transporte por carretera.
A finales de febrero, esta acción de control a gran escala involucró a Bélgica, Croacia, Chipre, Dinamarca, Italia, Lituania y Rumanía, reuniendo a inspectores de diversas autoridades nacionales, incluyendo organismos de transporte, policía y agencias de control laboral. También participaron inspectores visitantes de 12 Estados miembros: Austria, Bélgica, Bulgaria, Croacia, Hungría, Italia, Lituania, Países Bajos, Polonia, Portugal, Eslovenia y Eslovaquia.
Alcance de la Operación
Se llevaron a cabo inspecciones en un total de 420 camiones y autobuses, detectándose numerosas infracciones, principalmente relacionadas con los tiempos de conducción y descanso, el uso fraudulento o la manipulación de tacógrafos, las normas de cabotaje, la falta de documentos como licencias comunitarias y el trabajo no declarado. Estas infracciones resultaron en multas que superaron los 240.000 €. Un caso especialmente grave en Rumanía reveló que un conductor había reducido su período de descanso semanal en casi 17 horas.
Tecnología Aplicada
En Bélgica, los inspectores utilizaron lectores de comunicación remota de detección temprana (REDCR) para escanear vehículos equipados con tacógrafos inteligentes de segunda generación, lo que permite detectar posibles infracciones a distancia. A partir de enero de 2025, todos los vehículos que realicen transporte internacional por carretera deberán contar con estos tacógrafos avanzados para mejorar el control de cumplimiento y la seguridad vial.
Resultados
La operación produjo resultados significativos, con 170 inspecciones clasificadas como «limpias», es decir, sin infracciones. En total, participaron 320 agentes de control locales, junto con 51 inspectores visitantes y 14 miembros del personal de la ELA.
Las inspecciones conjuntas ROADPOL-ELA reflejan el compromiso de la UE con la mejora de las condiciones laborales y la seguridad vial en el sector del transporte. Mediante una cooperación transfronteriza más sólida y el uso de herramientas de control avanzadas, ROADPOL y ELA buscan garantizar el cumplimiento de la normativa y la protección tanto de los conductores como del público. El éxito de esta operación demuestra los continuos esfuerzos por mejorar la responsabilidad y el cumplimiento en la industria del transporte por carretera, altamente transnacional, según anunciaron ambas entidades.
Esta acción de control se llevó a cabo en el marco del proyecto STRIDER III, cofinanciado por la Unión Europea.