Parecía que el transporte de mercancías por carretera había encontrado el camino para reducir la morosidad en la actividad a partir del nuevo régimen sancionador vinculado a la Ley de Morosidad en el sector. Sin embargo, durante el mes de septiembre se ha registrado un notable aumento de los plazos de pago y la morosidad, circunstancia que supone un traspiés en la evolución positiva que se había registrado en los últimos meses. El sector clama por una actuación más incisiva de los servicios de inspección.
En este sentido, los últimos datos registrados en el Observatorio permanente de la morosidad de FENADISMER, estudio que se puso en marcha en julio de 2012, reflejan que durante el mes de septiembre el plazo medio de pago ha ascendido hasta los 73 días. Una cifra muy a tener en cuenta, ya que refleja un aumento de nada más y nada menos que nueve jornadas respecto al mes de agosto. Un amento mayúsculo que además rompe una tendencia realmente positiva hasta ahora.
Los datos son igual de preocupantes en lo que se refiere al incumplimiento latente de la Ley de Morosidad vigente en el transporte de mercancías por carretera. De hecho, el 59% de los pagos realizados por clientes a transportistas incumplen la citada Ley de la Morosidad durante el mes de septiembre, aunque quizá lo más preocupante es que el 39% de ellos se realizaron en un plazo superior a los 90 días y un 13% en más de 120 días o, lo que es lo mismo, seis meses.
Donde apenas hay cambio es en los métodos de pago preferidos por los clientes a la hora de pagar los servicios de transporte. En este aspecto, el 67% de las transacciones se realizan a través de transferencia bancaria, mientras que un 26% de los clientes opta por el confirming. En el 6% de los pagos se utiliza el pagaré, mientras que el cheque sigue siendo una opción residual que está presente en menos del 1% de las transacciones.