Los transportistas catalanes cobran mejor que los del resto de España. Esto se debe a que su principal contratación la realizan con cargadores y operadores logísticos ubicados en Cataluña, concretamente un 76% del total de su actividad, frente al 20% con cargadores del resto de España y solo un 3% del resto de Europa.
Así se desprende de la información publicada por la asociación catalana de transportistas ASTAC CONDAL, en colaboración con la Fundación Quijote para el Transporte, que ha divulgado públicamente los resultados del reciente Observatorio Catalán de la Morosidad y Medios de Pago en el Sector del Transporte de Mercancías por Carretera correspondiente a 2023, que se ha realizado con el respaldo y apoyo del Departament de Territori de la Generalitat de Cataluña.
En este segundo informe, continuación del llevado a cabo el año anterior, en el que participaron más de 300 autónomos y empresas de transporte catalanas de todos los ámbitos y tamaños, se ha destacado una vez más la mejor situación financiera en términos de cobros que disfrutan los transportistas catalanes en comparación con los del resto de España.
Esto provoca que el 81% de los cobros que reciben los transportistas catalanes se efectúen dentro de los plazos máximos legales de pago, es decir, en menos de 60 días, muy superior al de los transportistas del resto de España donde no alcanza el 60%, habiéndose observado además un incremento de más de 4 puntos respecto al año anterior, lo que en gran medida se debe a la actuación inspectora en esta materia.
Otro dato relevante obtenido del Observatorio catalán de la morosidad es el relativo al conocimiento del nuevo régimen sancionador de lucha contra la morosidad en el sector del transporte que fue aprobado a finales de 2021, en el que sorprendentemente un 39% afirma desconocer la existencia de dicho régimen sancionador.
En relación con lo anterior, aunque un 78% de los transportistas reconoció no haber percibido cambio alguno en los plazos de pago en 2023 en comparación con el año anterior, un 10% afirmó que sus plazos de pago se redujeron el año pasado. En este sentido, hay que tener en cuenta que en 2022 no hubo actuación inspectora de oficio en este ámbito, habiéndose incluido como actuación prioritaria en el año 2023 en el Plan Nacional de Inspección de Transporte, lo que está ayudando a mejorar sustancialmente el cumplimiento y aplicación de la legislación sobre morosidad en el sector del transporte por carretera. De hecho, un 4% de los transportistas encuestados afirmaron haber denunciado a sus clientes el año pasado por incumplimientos en materia de plazos de pago.
Por último, en cuanto a los medios de pago que son utilizados más habitualmente para el pago de sus servicios a los transportistas catalanes, principalmente se realizan por transferencia en un 53% de los casos, seguido del confirming en un 39%, siendo cada vez más residual tanto el pagaré como el cheque, con apenas un 7% entre ambos.
Asimismo, durante la jornada técnica se han presentado las herramientas contra la morosidad elaboradas por la asociación catalana, que incluyen una Guía de soporte contra la morosidad en el transporte, con los aspectos más destacables de la normativa, y una calculadora de plazos de pago con inclusión de las posibles sanciones en caso de incumplimiento, las cuales se pueden obtener en la página web de la asociación https://www.astac.info/. Además, se ha puesto a disposición del sector de transporte de mercancías una carta modelo informativa de la regulación actual para remitir a sus clientes.