Problemas endémicos como la escasez de mano de obra o los kilómetros en vacío, y otros nuevos como los conflictos regionales o el aumento de los peajes en Alemania, marcarán el sector del transporte de mercancías por carretera durante los próximos meses y el Grupo Trans.eu los analiza para proporcionar las claves que ayuden a superarlos.
En su informe «Perspectivas del transporte y la logística en España y Europa», Trans.eu, la plataforma de transporte por carretera más grande de Europa, con una comunidad de más de 4.000 operadores logísticos y 12.000 cargadores, analiza, de la mano de profesionales del sector, las consecuencias que el turbulento 2023 dejó en el panorama del transporte europeo y cómo afectarán en los próximos meses al conjunto de la industria.
El informe dedica una visión completa sobre los incrementos en los precios del combustible, otro de los ingredientes del menú lleno de incertidumbres que se presenta para 2024, y temas que se anticipan como imprescindibles para el transporte como son la electrificación, la presión para la descarbonización de las flotas, el auge del «nearshoring», los cambios a nivel legislativo (incluidos los relativos a las aduanas) y la imperativa necesidad de digitalización.
Precisamente sobre este punto, Verónica Rodríguez, Southern Europe Marketing Manager del Grupo Trans.eu, subraya que «a los viejos desafíos a los que se enfrenta el sector; se han unido otros más recientes como la escasez de conductores, la presión por la descarbonización y el contexto macroeconómico, muy sensible a la geopolítica actual. Un contexto que nos deja un escenario donde es difícil prever la evolución de los precios de transporte y para el que no nos queda otra que mirar hacia la digitalización».
Entre las conclusiones más relevantes figuran la notable disminución de los precios en el mercado spot y el auge de las rutas fijas, el aumento de las tarifas de transporte como consecuencia de las subidas en los peajes y del combustible o las consecuencias que ya están teniendo los planes de descarbonización y electrificación de flotas propuestas por la Unión Europea, entre otras.
En el estudio se recoge asimismo un capítulo exclusivo sobre España, elaborado con la aportación y previsiones de expertos de la industria, donde las empresas de transporte han comenzado a buscar soluciones para reducir costes mediante la tecnología y la optimización de rutas, además de detenerse en el análisis de la entrada en vigor del Plan Nacional de Transporte, que buscará poner solución a problemas como la morosidad y la falta de reemplazo de conductores profesionales.