La Unión TLF se manifestó en contra de la propuesta del Ministro de Transportes de Francia, François Durovray, de reactivar la ecotasa para camiones, un proyecto abandonado hace más de una década. Durante una entrevista en la cadena TF1, Durovray no descartó la posibilidad de retomar esta medida sobre los vehículos pesados.
La Unión de Empresas de Transporte y Logística de Francia (Unión TLF) emitió un comunicado advirtiendo sobre las graves consecuencias de dicha decisión. La Unión instó a negociar con las asociaciones empresariales para evitar repetir el fracaso que, en su momento, costó a los contribuyentes varios miles de millones de euros y generó protestas masivas.
En un contexto de crisis económica para los transportistas, el sector enfrenta un aumento sin precedentes de quiebras empresariales debido a la desaceleración de la economía. La TLF alertó que los flujos de caja de las empresas se han vuelto críticos y que las insolvencias alcanzan niveles históricamente altos.
Según la asociación, la reintroducción de esta ecotasa representaría una nueva carga para la competitividad de las empresas francesas, poniendo en riesgo directo a numerosas pequeñas y medianas empresas del sector. En particular, la TLF se opuso a los proyectos de ecotasa en Alsacia y en la Región del Gran Este, calificándolos como impuestos locales que penalizarían a las empresas locales, el transporte y la industria, así como al poder adquisitivo de los consumidores.
Por el contrario, la TLF aboga por una reducción urgente de los impuestos que gravan al sector del transporte de mercancías por carretera, uno de los más altos de Europa. Eric Hémar, presidente de ID Logistics y de la TLF, expresó su sorpresa ante la desconexión entre el debate político sobre la ecotasa y la realidad económica del sector. Según Hémar, la crisis económica ha afectado gravemente al sector, amenazando a muchas empresas, especialmente a las más pequeñas, lo que pone en peligro el empleo y la economía local.
La TLF pidió que el proyecto de ley de finanzas incluya una reducción de impuestos para las empresas de transporte, la eliminación del sistema de bono-malus del seguro de desempleo, y el mantenimiento del apoyo público para la ecologización de las flotas de camiones. Además, la Unión TLF se puso a disposición del Ministro de Transportes para discutir los desafíos que enfrenta el sector y solicitó ser incluida en las consultas anunciadas por el ministro.