Francia se prepara para seguir los pasos de otros países europeos, como Alemania y Dinamarca, con la posible implantación de una tasa por emisiones de CO2 dirigida al transporte de mercancías por carretera. Con la reciente implementación de una tasa similar en Alemania y el próximo lanzamiento en Dinamarca, la presión sobre Francia para adoptar una medida semejante está aumentando.

El Contexto Europeo

La preocupación por las emisiones de CO2 no es nueva en Europa, pero se ha intensificado en los últimos años debido a los compromisos medioambientales adquiridos por los países miembros de la Unión Europea. Países como Alemania han comenzado a liderar la transformación, introduciendo una tasa de 0,158 €/km para camiones Euro 6 Tipo 1 desde el 1 de diciembre de 2023. Esto significa que los camiones que cumplen con los estándares más estrictos de emisiones ahora deben pagar un peaje adicional basado en la cantidad de dióxido de carbono que emiten por kilómetro recorrido.

En paralelo, Dinamarca ha anunciado la implementación de su propia tasa de CO2 para camiones a partir del 1 de enero de 2025, lo que afectará inicialmente a los vehículos de más de 12 toneladas, para luego extenderse a camiones de más de 3,5 toneladas y abarcar toda su red vial.

La tendencia europea hacia la fiscalidad verde en el sector del transporte por carretera sigue en ascenso, y Francia no será una excepción en este proceso.

Impacto de la Tasa en el Transporte de Mercancías

La previsible introducción de una tasa por CO2 en Francia tendría un impacto directo en los costes operativos de las empresas de transporte, sobre todo en los trayectos internacionales que cruzan el país. A continuación, se exponen dos ejemplos que ilustran cómo estas tasas pueden incrementar el costo de transporte:

1. Trayecto entre La Junquera y la frontera de Francia/Bélgica (Lille)

Uno de los trayectos más comunes para los camiones que cruzan Francia es el que va desde La Junquera, en la frontera entre España y Francia, hasta Lille, en la frontera franco-belga. Actualmente, este recorrido supone un costo significativo en peajes y combustible, pero con la posible introducción de la tasa por CO2, este costo se incrementaría en 126,12 €, lo que representa un aumento del 43,73% con respecto al coste actual.

Este incremento, basado en la distancia recorrida y las emisiones generadas, tendría un impacto considerable en las empresas de transporte que utilizan este corredor con frecuencia, obligándolas a buscar alternativas más eficientes o a asumir los mayores costes.

2. Trayecto entre La Junquera y la frontera de Alemania (Mulhouse)

Otro trayecto clave para el transporte de mercancías por carretera es el que conecta La Junquera con la ciudad de Mulhouse, en la frontera entre Francia y Alemania. Este trayecto es esencial para el comercio entre España y Alemania, dos de los principales motores económicos de la UE. Con la posible tasa de CO2 en Francia, este recorrido en solo ida vería un incremento en su coste de 130,09 €, lo que supone un aumento del 56,86% respecto al coste actual.

Este tipo de trayecto se vería especialmente afectado por la tasa de CO2, dado que Alemania ya ha implementado una normativa similar. Las empresas de transporte que operen entre ambos países tendrían que pagar tanto en territorio francés como en territorio alemán, lo que podría duplicar los costos asociados a las emisiones.

Consecuencias para el Transporte y la Economía

La introducción de una tasa por CO2 en Francia tendría un impacto inmediato en el sector del transporte por carretera, afectando no solo a las empresas nacionales, sino también a las internacionales que atraviesan el país en su camino hacia otros destinos europeos. Los costes operativos aumentarían considerablemente, lo que podría provocar una serie de consecuencias económicas:

1. Aumento de los costes de las mercancías: Las empresas de transporte podrían trasladar el incremento de los costos a los precios de los productos que transportan, lo que podría provocar una subida de los precios de bienes de consumo en toda Europa.
2. Incentivo para la transición a tecnologías más limpias: Al gravar las emisiones de CO2, se obligará a las empresas a adoptar la opción de vehículos  como camiones eléctricos o de hidrógeno, reduciendo así la dependencia de los combustibles fósiles y las emisiones contaminantes, pero soportando el alto coste actual de este tipo de camiones.
3. Desarrollo de la infraestructura de recarga y repostaje: La posible implantación de la tasa por CO2 también podría fomentar la inversión en infraestructuras que apoyen el uso de vehículos de cero emisiones, como puntos de recarga para camiones eléctricos o estaciones de repostaje de hidrógeno.

El Futuro de la Tasa por CO2 en Francia

Aunque aún no se ha confirmado oficialmente, la implantación de una tasa por CO2 en Francia parece un paso inevitable, dados los compromisos europeos y las medidas ya adoptadas por sus vecinos. Francia podría basarse en los modelos de Alemania y Dinamarca, ajustando la tasa en función de las emisiones y la categoría de los camiones, para equilibrar la necesidad de reducir la huella de carbono con los impactos económicos para las empresas de transporte.

Francia ya ha mostrado un fuerte compromiso con la descarbonización del transporte, y la introducción de una tasa por CO2 podría ser una pieza clave en su estrategia de reducción de emisiones. A medida que más países europeos adopten estas medidas, el transporte de mercancías por carretera en Europa cambiará de manera significativa, orientándose hacia un modelo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.

Información facilitada por Vatservices durante la asamblea de ATFRIE