La Dirección General de Tráfico (DGT) pone en marcha entre el jueves 16 y el miércoles 22 septiembre una campaña específica de vigilancia de las distracciones en la conducción, las cuales ocasionaron más de 300 fallecidos en 2020.

Según ha informado el departamento que dirige Pere Navarro, esta iniciativa se enmarca en la campaña Operation Focus on the Road que desarrolla a nivel europeo la asociación RoadPol (European Roads Policing Network) y que este año coincide con la Semana Europea de la Movilidad.

En el año 2020, con los datos provisionales disponibles en este momento, la conducción distraída o desatenta estuvo presente en el 31% de los accidentes mortales, una cifra que se ha visto incrementada en 3 puntos con respecto a los datos de 2019 y que supone 319 accidentes mortales de los que fue responsable o corresponsable una distracción.

En este contexto, la DGT ha informado de que además de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil que vigilarán las vías interurbanas, también están invitadas a sumarse a esta campaña las policías municipales que pueden llevarla a cabo en el ámbito urbano.

A esta vigilancia a pie de carretera se suman los medios automatizados de los que dispone la DGT con 216 cámaras instaladas en las carreteras, a través de las cuales se puede constatar, entre otras cosas, si el conductor hace uso del móvil mientras conduce.

Tráfico ha destacado que uno de los principales motivos que genera la distracción del conductor es la utilización del teléfono móvil durante la conducción y ha añadido que «su uso multiplica por cuatro el riesgo de sufrir un accidente y el riesgo es equiparable a la conducción con exceso de alcohol».

«Un conductor que habla mientras conduce pierde la capacidad de mantener una velocidad constante, no guarda la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula delante y el tiempo de reacción aumenta considerablemente (entre medio y dos segundos, en función de los reflejos del conductor)», ha manifestado, para después añadir que «a mayor velocidad mayor riesgo de que una distracción provoque un accidente»: a 120 km/h, en 3 segundos, se recorrerá una distancia superior a la de un campo de fútbol.

La DGT ha hecho hincapié en que las distracciones provocan accidentes por salida de la vía, choques con el vehículo precedente o atropellos que pueden tener «desenlaces fatales».

Por ello, la DGT insta a los ciudadanos (conductores o no) a desconectar el móvil sin manos libres mientras se conduce –están permitidos aunque tampoco están exentos de riesgos–; disuadir a los conductores de llamar o coger el móvil mientras se conduce; y, como peatones, entender que el móvil también hace caminar ajenos a los riesgos viales cuando se va abstraído en una conversación.

En este escenario, el proyecto de ley que reforma el Texto Refundido de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, y que se encuentra actualmente en tramitación parlamentaria, prevé incrementar de 3 a 6 los puntos a detraer por conducir sujetando con la mano dispositivos de telefonía móvil.

Otros factores también provocan distracciones como pueden ser, entre otros, fumar mientras se conduce, que multiplica por 1,5 el riesgo de sufrir un accidente; el sueño y la fatiga, factores de riesgo desconocidos pero que concurren en la accidentalidad vial; o el uso de navegadores durante la conducción.