El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, tendrá como dos principales objetivos de su reconvertido Departamento el impulso de una Ley de Movilidad Sostenible y de una Ley Estatal de Vivienda.

«No vamos a llenar mapas con promesas de construcción de más y más nuevas infraestructuras. Ese enfoque y el de lidiar con reivindicaciones políticas territoriales pudo tener sentido hace unas décadas, pero hoy no captura bien nuestra misión«, aseveró Ábalos en la presentación del nuevo Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.

«Ello no significa que se vaya a dejar de invertir, dado que aún quedan corredores que completar, pero se hará de forma más razonable y para responder eficazmente a los desafíos de la movilidad, el urbanismo y la vivienda en el actual contexto social y tecnológico«, explicó.

Ábalos planteó así gráficamente la reorientación que pretende impulsar en el hasta ahora Ministerio de Fomento y su cambio de denominación.

A partir de ahora, las infraestructuras de transporte no serán el fin en sí mismo del Departamento, sino el medio para lograr su nuevo objetivo, el diseño de una Estrategia de Movilidad, Sostenible, Segura y Conectada que derivará en una Ley de Movilidad.

En el acto de presentación del nuevo Departamento y toma de su cartera, Ábalos manifestó además su deseo de que este texto legal sea fruto de un gran pacto de Estado sobre la materia. «Es un pacto al que no queremos renunciar porque les interesa a los españoles«, remarcó.

Asimismo, y en línea con el menor protagonismo de la construcción de nuevas infraestructuras, el ministro apostó por priorizar el transporte ferroviario de Cercanías como uno de los pilares para atender a los nuevos «desafíos de la movilidad«, junto con la intermodalidad entre transportes, la digitalización e innovación tecnológica y la estrategia y los desafíos medioambientales.

Durante la presentación del nuevo Ministerio, y para ilustrar el ‘peso’ del Departamento, detalló que el valor de las actividades de construcción, transporte e inmobiliarias que aglutina equivale al 20% del PIB».