La Organización Internacional del Transporte por Carretera (IRU) y sus instituciones asociadas han emitido una carta solicitando a los países que forman el G20 que apoyen de una manera más solida y contundente al tejido industrial y al sector del transporte de mercancías por carretera durante la pandemia del COVID-19. Desde el IRU se señala que la contribución del sector transporte es fundamental para la reactivación de la economía a nivel global, sobre todo en el proceso de recuperación que se afrontará tras la crisis.
IRU y sus organizaciones asociadas representan a más de 50 millones de empresas que dan trabajo a 800 millones de personas en todo el mundo, casi una cuarta parte del volumen de empleo a nivel mundial. Por esta razón, la fuerza que puede hacer el IRU y asociaciones como la Organización Internacional de Empleadores (IOE), la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA), la Federación Internacional de Ropa (IAF) o el consejo Mundial de Viajes y Turismos (WTTC) es muy a tener en cuenta.
En la misiva del IRU se pone de relieve la contribución colectiva a la economía global de este sector y el papel fundamental que tendrá el transporte de mercancías por carretera en la fase posterior a la pandemia del COVID-19, cuando se necesite un gran músculo productivo y financiero para afrontar el periodo de recuperación económica. Por este motivo, desde el IRU se solita a los gobiernos de los países del G20 que activen ayudas y programas de apoyo financiero al sector de inmediato para que este no se debilite.
En ese sentido, desde el IRU se pide que estos programas de apoyo y ayudas al sector del transporte de mercancías por carretera y otros sectores claves del tejido industrial den prioridad absoluta a los autónomos y Pymes por encontrarse al borde del colapso como consecuencia de la crisis del COVID-19. Para el IRU, la supervivencia de estos profesionales del transporte autónomos y de las pequeñas y medianas empresas es clave para la recuperación de toda la economía a nivel global.