FENADISMER ha informado al Ministerio de Transportes que un gran número de instaladores de tacógrafos de segunda generación están realizando prácticas abusivas, como exigir el pago anticipado total de la sustitución del tacógrafo, sin descontar la cantidad correspondiente a la subvención del «cheque moderniza».
El «cheque moderniza» es una subvención destinada a la modernización y digitalización de las empresas de transporte, financiada con fondos europeos NextGeneration. Esta subvención cubre, entre otras cosas, la sustitución del tacógrafo digital por uno de segunda generación, obligatorio para los camiones que realicen transporte internacional a partir del 1 de enero de 2025. El plazo para solicitar esta ayuda finalizó el 30 de junio, y sorprendentemente, los fondos no se agotaron, ya que, según estimaciones de la federación, hasta un 80% de la flota que opera a nivel internacional aún no ha sustituido su tacógrafo.
De acuerdo con las bases del «cheque moderniza», el instalador debe realizar la sustitución del tacógrafo y descontar de la factura total el importe de la subvención. Según el procedimiento, el proveedor (en este caso, el instalador) debe emitir una factura única que refleje la reducción correspondiente a la subvención del «cheque moderniza». El destinatario último, es decir, la empresa de transporte, debe abonar solo los costes no cubiertos por la subvención, mientras que la parte correspondiente al «cheque moderniza» se paga directamente al instalador una vez se reciba la subvención.
Sin embargo, algunos instaladores están solicitando el pago total por adelantado, posiblemente aprovechándose de la cercanía del plazo final, que es dentro de poco más de dos meses, para poder seguir realizando transporte internacional con el mismo vehículo tras la sustitución del tacógrafo.
También se debe tener en cuenta que los plazos para que la Administración efectúe el pago de estas subvenciones no son tan breves ni inmediatos como deberían.
Por todo ello, FENADISMER instará a las Comunidades Autónomas a que realicen controles en los talleres para verificar que cumplen con sus obligaciones, tal y como establece el Real Decreto que regula el «cheque moderniza».