Hyzon Motors y Chart Industries han unido fuerzas para el desarrollo de un vehículo pesado de transporte de mercancías por carretera que revolucione la actividad. La experiencia de Hyzon en el desarrollo de celdas de combustibles de hidrógeno y de Chart Industries en el diseño y fabricación de equipos de alta ingeniería servirán de base para la creación de un camión con pila de combustible de hidrógeno líquido que promete una autonomía de 1.600 kilómetros entre repostajes. Dato que, de ser cierto, coloca a este camión a la altura de los actuales vehículos Diésel.
Las dos compañías han firmado el compromiso de desarrollar y producir un vehículo comercial propulsado por hidrógeno líquido con una autonomía de 1.000 millas entre repostajes, lo que se traduce en un alcance de 1.600 kilómetros si se aplica el cambio de unidades. Un proyecto que se sustenta en la ventaja que supone usar el hidrógeno líquido en lugar de gaseoso, ya que es dos veces más denso, por lo que se puede almacenar el doble de energía al mismo volumen de tanque de combustible y todo con un peso menor.
El gran desafío del proyecto pasa por integrar en un vehículo de transporte dos tecnologías de perfil distinto, ya que mientras que los tanques móviles que almacenan el hidrógeno líquido requieren temperaturas de -423º F, la celda de combustible del vehículo requiere hidrógeno a temperatura ambiente. De ahí el vínculo entre Hyzon Motors y Chart Industries, ya que la combinación de estos equipos de hidrógeno supone un reto mayúsculo. Con todo, en caso de resolver este desafío, las perspectivas no pueden ser más positivas.
Al final, un camión con pila de combustible de hidrógeno que tenga una autonomía de 1.600 kilómetros se coloca a la altura de los vehículos Diésel y deja muy por detrás otras propuestas basadas en el propio hidrógeno o en la electromovilidad. Con un camión de este perfil y con esta autonomía, las estaciones de carga necesarias para asegurar la cadena de suministro serían menores, por lo que la inversión en infraestructura y los costos operativos son mucho más contenidos, dibujando un nuevo modelo de producción, transporte y distribución del propio hidrógeno.