La Diputación Foral de Guipúzcoa sigue en sus trece y en su actitud prepotente ha avisado que no está dicha la última palabra en torno al caso de los peajes a camiones en la N-1 y A-15. De hecho, las autoridades trabajan a toda prisa en una nueva norma foral que permita extender estas tasas a todo el recorrido de ambas vías, mientras que plantea incidentes de nulidad ante la sentencia del Tribunal Supremo. En esta línea, la Diputación seguirá cobrando peajes a los camiones hasta que se publique la sentencia del TSJ del País Vasco.

En su ánimo de ‘morir’ con las botas puestas mientras elabora una tercera norma foral que de validez a los peajes en la N-1 y A-15, dejando atrás su matiz discriminatorio, la Diputación de Guipúzcoa defiende que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco no será firme hasta que se publique en el Boletín Oficial de Guipúzcoa. Sólo entonces será totalmente obediente con la sentencia afirman desde la Diputación, apurando así el cobro de peajes a los camiones en la región.

Una manera clara y burda de ganar tiempo mientras se trabaja a contrarreloj para el diseño de una nueva norma foral para seguir cobrando los peajes a vehículos pesados por circular por la N-1 y la A-15. De hecho, la Diputación tiene previsto aprobar este nuevo decreto foral en los próximos días que seá de aplicación inmediata que habilite el cobro de estos peajes mientras elabora una nueva norma foral para su aprobación en las Juntas Generales.

Mientras la batalla judicial continúa con los sendos incidentes de nulidad presentados por la Diputación ante el Supremo, la postura arrogante de la administración ha sido mostrad una vez más por la diputada Aintzane Oiarbide: «Ninguna sentencia cuestiona nuestra capacidad para poner peajes en nuestras carreteras. Por lo tanto, está fuera de toda duda el derecho de Guipúzcoa a cumplir el mandato democrático de sus Juntas Generales. Quien compra la carga del camión debe pagar esos gastos, igual que nosotros cuando cogemos un taxi pagamos el peaje además del viaje».