Las principales asociaciones y entidades de gruistas integradas en la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera denuncian el trato y las enormes esperan que sufren de manera recurrente los clientes y ellos mismos por parte de las aseguradoras y clubes automovilísticos, lo que al final también afecta de manera grave a su trabajo. En este sentido, los operarios de grúa denuncian esperas de 40 minutos en la atención telefónica para los clientes y una grave desatención y deficiencias en el servicio cuando están realizando labores en carretera.
El sector del Auxilio en Carretera, recientemente unido bajo el paraguas de la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera, ha alzado la voz ante las prácticas de distintas aseguradas y clubes automovilísticos y la nefasta atención que llevan a cabo. Los clientes, pero también los propios gruistas, se ven en ocasiones al teléfono durante más de 40 minutos para resolver incidencias que surgen ya no sólo cuando un vehículo se avería o tiene un accidente, sino en el propio desarrollo y gestión de las operaciones de auxilio en carretera.
Esta atención deficiente es generalizada y no suele tener en cuenta las situaciones de extrema urgencia que se pueden dar cuando hay un siniestro en la vía pública. Por ese motivo, gruistas y empresas dedicadas al auxilio en carretera piden que se solucione de manera inmediata este problema, ya que no se trata de algo puntual que puede derivar del mayor volumen de tráfico y desplazamientos que se produce en el periodo estival. En caso de no recibir una repuesta afirmativa de aseguradoras y clubes del automóvil, la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera hará públicos los retrasos que padecen.
El propio portavoz de la Alianza Nacional de Auxilio en Carretera, Xavier Martí, ha señalado al respecto de esta situación: «Reclamamos una inmediata solución porque este problema no es algo puntual y sí una situación recurrente. No quisiéramos que este asunto haga retomar la agenda del conflicto en vez de la del diálogo emprendido, pero no estamos dispuestos a que se juegue con nuestra seguridad y patrimonio por una deficiente atención telefónica por parte de las aseguradoras y clubes del automóvil».