El Consejo de ministros ha autorizado la firma de un convenio entre la Administración General del Estado (AGE) y la Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte Terrestre (SEITT) para que las autopistas revertidas al Estado se mantengan bajo la gestión del Gobierno hasta finales de 2032. Con este convenio regulador por diez años se fija la gestión de explotación de las autopistas de titularidad estatal, dando continuidad al trabajo realizado al amparo del convenio que se suscribió hace ahora cinco años, en 2017.
Cabe recordar que aquel convenio fijaba que entre 2018 y 2019 el SEITT iba a tomar el control de la gestión de las radiales R-2, R-3, R-4 y R-5, autopistas de peaje que fueron diseñadas como alternativas a las principales autovías de entrada y salida de Madrid. También contemplaba la gestión de la M-12, AP-41, AP-36 y la AP-7 en la Circunvalación de Alicante y entre Cartagena y Vera a través de su entrada en el concurso de acreedores y posterior liquidación.
El nuevo convenio permite atribuir a SEITT la gestión directa de la explotación y conservación de las autopistas ya citadas, así como la autorización de la licitación del contrato de concesión de seis áreas de servicio gestionadas por el SEITT por un valor estimado de 44.397.303,05 euros por un plazo de cinco años. Además, el acuerdo permite a la sociedad completar las inversiones pendientes y optimizar su organización y gestión para así lograr un funcionamiento eficiente durante el periodo de gestión citado.
El nuevo convenio aprobado por el Consejo de ministros prevé, a su vez, actuaciones de conservación y mantenimiento de la vialidad, encaminadas a la defensa de la vía y a su mejor uso, incluyendo mejora de la señalización, integración ambiental, seguridad viaria, ordenación de accesos y uso de las zonas de protección de la carretera, sin perjuicio de las competencias atribuidas legalmente en materia de señalización a los organismos responsables de la gestión del tráfico.