El Gobierno dirigido por Pedro Sánchez aplicará este viernes una prórroga hasta septiembre de los ERTE por fuerza mayor a los que están acogidos más de 65.000 trabajadores del sector del transporte de mercancías por carretera como consecuencia de la pandemia de COVID-19. A su vez, el Ejecutivo central también ampliará las ayudas a los profesionales autónomos fijadas en el Estado de Alarma, por lo que un total de 74.795 profesionales acogidos a esta prestación extraordinaria mantendrán la exención de las cuotas de autónomos.

El confinamiento decretado por la crisis del COVID-19 y las consecuencias económicas que van asociadas a la pandemia obligaron al Gobierno a establecer una serie de medidas laborales con las que paliar su impacto. Con el fin de tratar de evitar despidos masivos, también en el sector transporte, se posibilitó que las empresas y autónomos con asalariados pudieran acogerse a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), mientras que también se puso en marcha la prestación por cese de actividad extraordinario para los autónomos.

En el caso del sector transporte, un total de 74.500 trabajadores han estado sujetos a los ya famosos ERTE, de los cuales todavía siguen en dicha situación en torno a 65.300. Por su parte, 74.795 autónomos del transporte y la logística se han beneficiado de las ayudas por actividad suspendida o reducida sustancialmente. Por este motivo, la decisión del Gobierno de ampliar los ERTE y de las ayudas a autónomos hasta el 30 de septiembre ha sido acogida con agrado en la profesión.

Sin embargo, la ampliación de los ERTE y las ayudas a autónomos desde finales de junio al 30 de septiembre tiene letra pequeña, ya que se reducirá la intensidad de las mismas. En el caso de los ERTE por fuerza de mayor la exención de las cotizaciones empresariales será del 70% y no del 100% en julio, del 60% en agosto y del 35% en septiembre para empresas o autónomos con menos de 50 trabajadores. Para las empresas con más de 50 personas asalariadas será del 50% en julio, del 40% en agosto y del 25% en septiembre. Los ERTE por causas organizativas, económicas y de producción se igualan a los ERTE por fuerza mayor.

Por su parte, los profesionales autónomos podrán seguir recibiendo la prestación económica extraordinaria a partir del 1 de julio -aunque pasa a considerarse ordinaria- siempre que la facturación en el tercer trimestre de este año sea al menos un 75% inferior al del periodo equivalente de 2019 y, asimismo, que los rendimientos netos no sean superiores a 1.939 euros mensuales. Para los autónomos que no cumplan estos requisitos, se mantendrá la exoneración de la cuota de la Seguridad Social al 100% en julio, en un 50% en agosto y en un 25% en septiembre.