La Ministra de Transportes francesa, Elisabeth Borne, ha comentado que «no se ha tomado ninguna decisión sobre la implementación de una etiqueta adhesiva para vehículos pesados» (viñeta), un proyecto muy criticado por los transportistas por carretera.

En referencia a la viñeta la ministra indicaba «Se trata de un tema delicado en el que es útil dedicarle tiempo. El hecho de que los camiones extranjeros contribuyan al mantenimiento de las carreteras que utilizan sigue siendo un buen método de trabajo. Pero bajo ninguna circunstancia cobraremos a los particulares».

La presión social de los «chalecos amarillos» y los cortes de carretera están afectando de manera muy seria al gobierno de Macron. El país francés está sufriendo manifestaciones, cortes y bloqueos de carreteras desde hace una semana y parece que la presión, tanto nacional como internacional, está surgiendo efecto.

Hoy Lunes 26 de noviembre, continúan los bloqueos de los «chalecos amarillos» en distintas zonas de Francia, afectando de nuevo al transporte por carretera, tanto interno como el internacional. Durante estos días de manifestaciones de los «chalecos amarillos» se han producido grandes retenciones y el transporte internacional, sobre todo el español, se ha visto afectado de manera significativa, con grandes perdidas para el sector.

Pese a que el sector del transporte por carretera francés no se ha unido a estas movilizaciones, si que algunos chóferes han aprovechado para mostrar su descontento, uniéndose a este movimiento. Una de las reclamaciones, además del alza del precio de combustible, son los salarios de estos chóferes, que han solicitado un aumento del mismo.

El gobierno francés está reaccionando, y anunciará un plan de inversiones a nivel provincial y estatal para mejorar los servicios públicos de transporte y una mejora de las infraestructuras viarias, un plan que lleva años paralizado y que parece que por fin, verá la luz.

Elisabeth Borne: «El estado también invertirá 2.600 millones para aumentar la oferta de trenes diarios donde hay más necesidades«,   afirma que habrá «un 50% más de recursos para rehabilitar la red ferroviaria«. La ministra también mencionó el lanzamiento de un «plan de acceso a las carreteras de 10 años por valor de 1.000 millones de euros«: «Se trata de carreteras prometidas desde hace décadas, que aún no han sido construidas y que están alimentando la sensación de abandono«, señala.