El sector agrícola español ha iniciado distintas movilizaciones y protestas ante lo que es para muchos un sistema agroalimentario insostenible. Manifestaciones que a imagen y semejanza de las desarrolladas en Francia en las últimas semanas ya están afectando a la movilidad y el transporte profesional. Al respecto, FENADISMER pide responsabilidad a los agricultores españoles en el desarrollo de sus movilizaciones para no paralizar los servicios de transporte profesional de mercancía por carretera, respetando como no puede ser de otra forma las reivindicaciones del campo.
Como era de esperar tras la llama prendida en Francia, los agricultores españoles han decidido salir a las calles para protestar contra las políticas económicas, sociales y medioambientales que se están llevando a cabo tanto a nivel nacional como en la Unión Europea. Sus protestas, por el momento, no han provocado grandes bloqueos de vías de alta capacidad, aunque sí que ha habido movimientos para bloquear y/o paralizar polígonos industriales y centros logísticos, asociados principalmente con cadenas de alimentación y supermercados.
En este sentido, FENADISMER recuerda que los movimientos de los agricultores franceses en las últimas semanas han provocado pérdidas directas de 120 millones de euros al sector del transporte de mercancías por carretera, a los que habría que sumar los ocasionados también a los propios productores y exportadores. Al final, el transporte no es el enemigo del campo y sí un socio fiel que compartiendo y apoyando las reivindicaciones de las organizaciones agrarias sólo quiere mantener su actividad.
FENADISMER recuerda también que el transporte y el sector agrícola se sitúan en posiciones parecidas frente a las grandes empresas, por lo que pide a las organizaciones agrarias que en el ejercicio de sus protestas intenten afectar en la menor medida de lo posible al desarrollo de la actividad del transporte de mercancías por carretera, evitando sobre todo actos violentos como los que se han visto en Francia. Además, la organización espera que en caso de darse este tipo de actos, el Ministerio del Interior actúen junto a las fuerzas de seguridad para garantizar el derecho de libre circulación.