La Federación Gallega de Transportes de Mercancías (Fegatramer) ha emitido un comunicado advirtiendo de la difícil situación que vive el transporte profesional, asegurando además que las imágenes que se han visto en Reino Unido pueden llegar a España muy pronto. El objetivo de Fegatramer es avisar al grueso de la población que la actual situación económica y social y del propio sector transporte dibuja un escenario en el que se pueden llegar a producir cortes de la cadena de suministro y situaciones de desabastecimiento.

Las imágenes de estanterías vacías en los supermercados de Reino Unido o de gasolineras que han tenido que cerrar ante la falta de combustible no son tan lejanas como puede parecer. De hecho, los portavoces de Fegatramer lo dejan claro: «Ahora mismo, las empresas del sector del transporte público de mercancías están cerca de sufrir lo que puede ser una tormenta perfecta por los efectos de la pandemia, la subida de la electricidad, el precio desorbitado del Diésel, las tasas e impuestos de todo tipo que sufre el sector y el modelo de pago por uso de las autovías en el horizonte».

A esta situación visible por todos, Fegatramer añade otros problemas como la incapacidad de trasladar los costes citados a los cargadores por la habitual posición de dominio que ejercen en el mercado. Además, también suma la nefasta gestión política por parte de todas y cada una de las administraciones, ya que parecen más preocupadas en recaudar que en atender las claras necesidades del sector del transporte público de mercancías por carretera. Por eso, desde Fegatramer se pide la búsqueda de alternativas y soluciones para que la profesión pueda responder a las exigencias actuales.

Además, el comunicado de Fegatramer ahonda en la realidad del sector: «La falta de chóferes viene dada por la difícil situación de las empresas que no pueden pagar salarios atractivos. Además, hay que prohibir de una vez por todas los abusos con las cargas y descargas, actualizar las medidas de protección de la salud y de seguridad laboral y profundizar en las buenas prácticas dentro del sector y en la formación profesional adaptada a las nuevas necesidades. Sólo así se evitará la falta de conductores y también de empresas de transporte públicos de mercancías y sus camiones. Esos que hoy faltan en Reino Unido«.