Las hostilidades entre España y Marruecos con el transporte de mercancías de carretera como protagonista han acabado de tal forma como han trascurrido, en ‘silencio’ y de forma un tanto extraoficial. No obstante, España habría dejado de presionar a los camiones marroquíes y no estaría controlando el límite de 200 litros de combustible que como máximo deberían portar en los depósitos. A cambio, Marruecos también ha relajado la presión y los controles sobre los semirremolques españoles que llegan al país por Tánger Med.

Pese a que de cara a la galería las relaciones entre España y Marruecos no han sufrido ninguna crisis, en los últimos meses la tensión entre ambas partes se ha hecho palpable, sobre todo en el puerto de Tánger Med. No obstante, España había recuperado una ley europea de 1992 que regula el Impuesto sobre el Valor Añadido y que limita a 200 litros el volumen máximo de combustible a importar de Marruecos a España en los depósitos de los camiones, movimiento que permite recaudar un importe extra por los repostajes adicionales y las multas que se han impuesto.

Como respuestas, Marruecos había endurecido los requisitos y controles para limitar el paso de semirremolques españoles, ya que las empresas debían tener un acuerdo de colaboración con una compañía marroquí para poder operar. Medidas opuestas que ahora se han venido ‘abajo’ dentro de una especie de tregua extraoficial que se ha construido a la espera de una solución definitiva en forma de acuerdo bilateral con la Unión Europea y, por ende, con España como Estado miembro. Una tregua que por otra parte hace respirar al sector.

La calma ha llegado en gran medida porque los controles sobre la denominada franquicia de carburantes se han reducido en la frontera española casi a cero. Una circunstancia que han confirmado los propios profesionales del transporte que utilizan esta ruta y que en muchas ocasiones se han visto expuestos a controles de 60 ó 70 minutos que terminaban con la imposición de multas que iban de los 500 a los 700 euros. Ahora, la situación es menos tensa y se ha vuelto a una dinámica positiva por ambas partes a la hora de afrontar una negociación con otros puntos técnicos a definir.