«No vamos a consentir que se grave más a la carretera». Así lo asegura el presidente de la Asociación provincial de Transporte por Carreteras, Carlos Marín.

Marín también recordó que más del 80% de quienes están al volante de un camión son autónomos, pymes y micropymes y que los «siete céntimos por litro que quieren aplicar de subida diésel implicarán que algunos no puedan comer», dijo en referencia a la dificultad que tienen los transportistas, para repercutir los costes para sus clientes que, en algunos casos, «es imposible».

Así, aseguró que lo tienen «muy claro» y advirtió que en el caso de que el Gobierno hiciera efectiva la subida de los impuestos que afectara a los profesionales de la carretera, especialmente, «paramos España», dijo Marín que recuerda que el 88% de las mercancías del país se transportan por carretera.

«Ojo con atacar a la carretera con más gravámenes, que paramos España», aseguró. En concreto, el Gobierno planea subir el diésel para equiparar su tributación con la gasolina, aunque ha afirmado que en principio, «no afectará a autónomos y profesionales».

Para Marín, el sector ya tiene «bastante» con la oscilación que sufre el precio del barril de Brent, que condiciona el 36% del coste de los transportistas, como para tener que asumir más impuestos, dijo. Además, lamentó también que el Gobierno, una vez en el poder mire a este sector para aumentar la recaudación.

Por otra parte, en cuanto a las declaraciones de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, de que el diésel tiene «los días contados», Marín comentó que «será por la propia imposición del mercado» y «a medio plazo», ya que cada vez más transportistas buscan opciones sostenibles, pero «no de forma coercitiva, aumentando los impuestos», sentenció.