Pese a la buena voluntad del Departamento de Mercancías del Comité Nacional del Transporte por Carretera (CNTC) y todas las asociaciones y las reuniones mantenidas con el fin de evitar el paro patronal de los días 27 y 28 de julio, el desprecio del ministerio de transportes y el Gobierno, continua hacia el sector.
En una reunión más entre ambas partes se han puesto hoy sobre la mesa las problemáticas que afectan gravemente al sector del transporte, pero sin llegarse a acuerdos ni a verse voluntad institucional en acercarse a estas justas reivindicaciones.
En el ya lejano mes de Febrero se presentaron 10 propuestas al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de D. José Luis Ábalos para asegurar el futuro del sector del transporte de mercancías por carretera y de sus trabajadores.
A fecha de hoy, se plantea únicamente el Ministerio ofrecer un «compromiso» sobre la no modificación de las dimensiones y pesos o el pago por el uso de infraestructuras. ¿Pero que pasa con el resto de propuestas realizadas por el sector? Pues parece ser, que por el momento, caen en saco roto.
¿Que pasa con la modificación de la ley de contrato de transporte? De la derogación de la posibilidad del pacto en contrario, de los plazos de pago, de la aplicación de la cláusula de revisión del precio del combustible y operaciones de carga y descarga por parte de los chóferes, nada de nada.
Los transportistas autónomos y las empresas tendrán que seguir viendo, por el momento, como se vulneran sus derechos porque desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de D. José Luis Ábalos se les sigue despreciando.
Un sector estratégico que genera empleo y riqueza a nuestro país queda en el más absoluto olvido, no como durante la pandemia del COVID-19 y el estado de alarma, que fueron «heroes anónimos» de los cuales, ya nadie se acuerda y lo peor de todo, ni quieren acordarse.
«Pocas novedades en el frente» decía el soldado a su general, seguimos solos y abandonados en las trincheras, así que únicamente nos queda arrimar el hombro todos juntos en la búsqueda de la defensa de nuestros derechos y de un trabajo digno y correctamente remunerado.
Cada vez está más cerca el 27 y 28 de julio … luego algunos se echarán las manos a la cabeza, pero ya será tarde.