El debate sobre las tareas de carga y descarga es uno de los problemas históricos del sector del transporte de mercancías por carretera. Sin esperanzas de una solución a corto plazo, CETM y FENADISMER han decidido llevar esta problemática a la Comisión de Seguridad Vial del Congreso de los Diputados. El objetivo es que el Gobierno central tenga en cuenta los perjuicios que supone la carga y descarga para los conductores profesionales en la elaboración de la Estrategia de Seguridad Vial para el periodo 2021-2030.

Julio Villaescusa como presidente de FENADISMER y Miguel Pereira como asesor laboral de la CETM han puesto de relieve durante sus exposiciones la crítica situación del sector y todo lo que implica la problemática de la carga y descarga, así como las históricas reclamaciones de los transportistas y las empresas del sector para un mejor funcionamiento de la actividad. Uno de los puntos clave de ambas exposiciones ha sido la fatiga que supone que los conductores asuman la carga y descarga, hecho que afecta a la Seguridad Vial.

La fatiga derivada de la realización de las tareas de carga y descarga y el aumento del estrés por la crítica situación que vive el sector como consecuencia de la pandemia de COVID-19 han provocado que la tendencia en el número de conductores profesionales fallecidos tanto en camiones ligeros como en pesados en accidente de tráfico haya cambiado, multiplicándose por tres el número durante el último año. Un factor a tener en cuenta, ya que casi un 70% de los conductores profesionales reconocen participar en las tareas de carga y descarga.

Y es que dejando a un lado el aumento de la fatiga, un tercio de los accidentes laborales en el sector están relacionados con las propias labores de carga y descarga. Por ese motivo, tanto el CETM como FENADISMER solicitan que se prohíba la participación de los chóferes en las labores de carga y descarga -también para conductores autónomos-, salvo en determinadas especialidades que por la naturaleza de la carga o las condiciones técnicas del vehículo se aconseje su intervención.

Al margen de esta problemática, los representantes del CETM y de FENADISMER han puesto encima de la mesa otras propuestas para mejorar la Seguridad Vial que pasan por la creación de una ley que obligue a los conductores profesionales a superar reconocimientos médicos anuales, la introducción del ‘alcolock’ en vehículos comerciales y la puesta en marcha de áreas de estacionamiento seguras y protegidas. También se ha solicitado un programa de ayudas para la renovación del parque móvil y la puesta en marcha de iniciativas de formación en seguridad vial dirigidas a los profesionales del transporte.