Un mes después de la grave crisis que se produjo en las fronteras entre Reino Unido y Francia, provocada a partes iguales por el Brexit y la aparición de la nueva cepa de COVID-19, el tráfico de camiones entre el Reino Unido y el continente se ha estabilizado. Sin embargo, la realidad es que no se puede hablar de normalización ya que los problemas vinculados al Brexit siguen complicando el normal desarrollo del transporte de mercancías por carretera. De hecho, las colas y retrasos en las instalaciones del puerto de Dover y del Eurotunnel son una constante.
En este aspecto, la Unión Internacional del Transporte por Carretera (IRU) señala que durante el primer mes del ejercicio 2021, el Brexit ha reducido la capacidad de transporte entre Reino Unido y la Unión Europea, elevando los costes y provocando un mayor número de errores de perfil administrativo, circunstancia que al final repercute en la dinámica fronteriza. Y es que las colas en el puerto de Dover han alcanzado las ocho horas en los últimos días.
Se constata así que el Brexit está afectado al tráfico de camiones entre los países de la Unión Europea y Reino Unido, en una situación que está lejos de normalizarse por completo. Las colas de camiones, los retrasos y las interrupciones en la cadena de suministro son casi una constante, provocando situaciones complicadas para los transportistas en primer término, pero también para las empresas y operadores. De hecho, las primeras estadísticas reflejan una caída del tráfico de camiones de un 60% respecto a enero de pasados ejercicios.
Mientras una media de 2.500 camiones diarios sale del puerto de Dover, cualquier aumento del tráfico se traduce en colas de hasta ocho horas. Los tiempos de espera provocan a su vez que los costes también hayan incrementado, más allá del propio precio de los servicios. De hecho, un envió urgente a través del Canal es diez veces más caro a finales que hace un año, todo en un escenario en el que el descenso de la capacidad de transporte en las rutas entre Reino Unido y Europa, con Francia a la cabeza, alcanza un 22%.