La Federación Europea de Trabajadores (EFT) ha dirigido una misiva a la Comisión Europea con el fin de hacer ver que las medidas tomadas para combatir el COVID-19 no son correctas, al menos en lo que al sector del transporte de mercancías por carretera se refiere. Según este organismo, los denominados ‘carriles verdes’ propuestos en las fronteras están desconectados de la realidad de los países de la Unión Europea y de la propia situación del transporte por carretera por el desarrollo de la pandemia.

Pese a que la Unión Europea ha instado en este periodo de excepción a mantener las fronteras abiertas para facilitar el normal tránsito de camiones, lo cierto es que las resoluciones que se están tomando en los Estados miembros para evitar la expansión del COVID-19 son contrarias a este hecho. No obstante, los países de la UE están adoptando medidas cada vez más drásticas a la hora de frenar la entrada y salida de ciudadanos y mercancías de sus naciones. De hecho, las esperas en las fronteras se han vuelto una constante en países como Alemania, Polonia o Lituania, algo que contrata con la propuesta de ‘carriles verdes’ en las mismas para todo tipo de mercancía.

Para la ETF la comunicación de la Comisión Europea va en contra de los esfuerzos que están realizando los Estados Miembros para contener la pandemia. Y es que para este organismo la idea que se transmite es que los chóferes deben pasar las fronteras con controles mínimos de salud y que estos permanezcan en el interior de los camiones durante grandes periodos de tiempo sin mayor vigilancia. Además, esta comunicación está referida a todo tipo de transporte y no a los bienes de primera necesidad, lo que a su vez causará un mayor caos en las fronteras.

Por esta razón, la ETF pide que se limite el tránsito de camiones a bienes de primera necesidad y se anule todo servicio no esencial, desechando la idea de ‘carriles verdes’. De igual forma, insta a que los esfuerzos se centren en preservar la salud y seguridad de los chóferes, pidiendo incluso que la exención a los tiempos de conducción y descanso no se apliquen en las zonas rojas como Italia. Por eso, ETF solicita que los controles se centren en el cumplimiento de estas normas, en el tipo de mercancías que se transportan y de los documentos que certifican las exenciones de cada país.