La pandemia de COVID-19 ha llevado al sector del transporte de mercancías por carretera al límite. Considerada actividad esencial durante el Estado de Alarma con el fin de garantizar la cadena de suministro y el abastecimiento de productos de primera necesidad, muchos de los transportistas que han soportado esta carga han vivido situaciones muy difíciles. La falta de equipos de protección sólo ha sido la punta del iceberg para los profesionales del transporte, condenados a tener serios problemas para encontrar establecimientos en los que comer, asearse o descansar.

Pese a la crítica situación que han vivido los chóferes en el desarrollo de su actividad, la pandemia de COVID-19 también ha dejado historias que merecen ser contadas. El protagonista de una de ellas es Félix, dueño de un hotel restaurante situado en la Nacional I que regenta junto a su mujer. Durante el Estado de Alarma, la pareja quedó confinado en su negocio, aunque eso no impidió que viendo a un transportista que se había detenido en su aparcamiento le ofrecieran café.

Un sencillo gesto que emocionó a este transportista, que reconocía emocionado que llevaba tres días sin tomar nada caliente, sin poder ducharse y sin asearse como debería. El chofer quiso pagar el café, pero Félix se apresuro a invitar a este transportista. Un acto solidario que nació como un pequeño detalle, pero que se hizo gigante según fue aumentando el goteo incesante de transportistas a lo largo de los tres meses del Estado de Alarma. Durante este periodo, nunca faltó un café caliente gratis para ningún transportista.

Más allá de invitar a café a los profesionales del transporte o de pedir la voluntad por los bocadillos que preparaba para los chóferes, el gran gesto de Félix fue permitir a todos y cada uno de los transportistas utilizar el aseo y darse una ducha, instalaciones que Félix y su mujer desinfectaba con lejía para evitar el riesgo de contagio por coronavirus. Gesto que ahora ha sido correspondido por los transportistas a través de redes sociales, invitando a frecuentar el hotel de Félix, establecimiento situado en la Nacional I a la altura de Pancorbo (Burgos).