El Brexit sin acuerdo parece inevitable a tres semanas de la finalización del periodo transitorio. Reino Unido y la Unión Europea no han sabido encontrar el camino para regular el transporte de mercancías por carretera entre ambas partes, lo que tendrá graves consecuencias para el sector español. Cualquier transportista que quiera viajar a Reino Unido deberá contar con una autorización CEMT, aunque estas están limitadas. De hecho, España sólo posee 800 de estas autorizaciones para los más de 8.000 transportistas que viajan a Reino Unido.
El periodo transitorio del Brexit ha entrado en su recta final sin que haya un acuerdo bilateral para regular el tránsito de personas y mercancías entre la Unión Europea y Reino Unido. Fruto de esta circunstancia, el transporte de mercancías por carretera pasará a estar regulado por las autorizaciones CEMT al funcionar Reino Unido como un Estado tercero respecto a la Unión Europea. España sólo tiene 800 de estas autorizaciones, pero unos 8.000 camiones de origen español operan entre ambos países en la actualidad.
A partir del 1 de enero de 2021, todas las empresas españolas y del resto de la Unión Europea que deseen importar o exportar mercancías desde Reino Unido deberán contar con un número de registro de identificación de operación económico (EORI). Además, ante la falta del acuerdo entre ambas partes, el Gobierno británico sugiere a las empresas que soliciten la autorización CEMT en previsión de que la actual licencia comunitaria europea no sea válida. Sin embargo, esto no es una solución para el sector transporte español.
Sin embargo, la solución planteada por el Gobierno británico es inadmisible, por una simple cuestión de volumen de autorizaciones CEMT. No obstante, Reino Unido es el quinto mercado más importante para las exportaciones por carretera españolas, por lo que tener disponibles 800 autorizaciones CEMT significa que el volumen de camiones que operan entre España y Reino Unido se reduce un 90%. Un cupo muy limitado de autorizaciones bilaterales que no sirve para solucionar este grave problema, ya que este tipo de permisos son utilizados también para exportar a otros países fuera de la Unión Europea.