La bonificación al combustible para transportistas profesionales que fue aprobada al cierre de la anterior línea de ayudas con carácter general ha cumplido tres meses. Desde el 1 de enero y hasta el 31 de marzo, los transportistas han recibido una bonificación de 20 céntimos por litro de Diésel o Gasolina, si bien el pago de esta ayuda está por realizarse para los transportistas que no están acogidos al Gasóleo Profesional, mientras que se ha ido pagando en paralelo a esta figura para los que sí están acogidos.
Con el cierre de marzo y el inicio de abril, tal y como estaba previsto la ayuda al combustible se reduce a la mitad, pasando de 20 a 10 céntimos por litro de Diésel o gasolina. Desde este sábado 1 de abril, la bonificación será de 10 céntimos ante la evolución favorable del precio del combustible con carácter general. Así lo confirmó el Ejecutivo en el último Consejo de ministros celebrado la pasada semana. Por su parte, los vehículos de gas pasarán a tener una compensación de 14 céntimos, por los 27 que recibían hasta ahora.
Además, el Gobierno ha confirmado su intención de poner fin a esta línea de ayudas directas para transportistas al cierre del segundo trimestre, es decir, el 30 de junio. Se seguirá así los pasos de la desaparición de las ayudas a particulares que tuvo lugar el pasado 31 de diciembre de 2022. El presupuesto para cubrir la bonificación de 20 céntimos por litro hasta marzo y de 10 céntimos hasta finales de junio ascenderá a unos 598 millones de euros.
La medida ha sido aprobada por el Consejo de ministros ante la evolución del precio final de los combustibles en los últimos meses. En este sentido, cabe señalar que el precio medio del litro de Diésel está en torno a los 1,54 euros, mientras que el de gasolina se mueve en torno a los 1,62 euros. Cifras todavía muy altas, pero que se alejan de los máximos históricos por encima de los 2,1 euros en ambos tipos de combustibles.