A partir del 1 de mayo de 2018 Bélgica permitirá las pruebas con vehículos autónomos en sus carreteras y autovías con el fin de agilizar el proceso de adaptación de estos vehículos. Bélgica es uno de los primeros países europeos en permitir tales pruebas en las vías públicas.

Los vehículos autónomos representan una solución futura para mejorar la movilidad y la seguridad vial. De hecho, podrían ayudar a reducir las emisiones y la congestión del tráfico. Además, sin un conductor a bordo, se eliminará el factor humano que causa muchos accidentes de tráfico.

El desarrollo de esta tecnología innovadora requiere experimentación controlada. Para supervisarlo, el Consejo de Ministros de Bélgica adoptó en 2016 un Código de buenas prácticas que detalla numerosas recomendaciones para las organizaciones que deseen llevar a cabo pruebas en Bélgica. Este Código fue establecido para todos los niveles de automatización, pero asumiendo que siempre habría un conductor u operador a bordo.

Ahora se ha insertado una disposición en el Código de circulación para autorizar al Ministro Federal de Movilidad o a su delegado a que derogue de manera excepcional y limitada en el tiempo cualquier norma contenida en el Código de circulación.

A partir del 1 de mayo, es probable que se pruebe cualquier sistema de vehículo automatizado en Bélgica. En términos prácticos, esto significa que, si el Ministro lo autoriza, un vehículo puede moverse de manera completamente autónoma en las vías públicas, con solo un operador que monitorea remotamente desde una sala de control.

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