El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ha publicado, a través de la Dirección General de Transporte Terrestre, la resolución provisional de la línea de ayudas concedidas a los transportistas autónomos por abandono de actividad, ya sea por su edad o por situación de invalidez. Como era de esperar ante la partida presupuestaria aprobada, prácticamente igual a la del pasado ejercicio, la publicación de esta resolución este martes 20 de julio confirma que el 60% de los transportistas de avanzada edad o en situación de invalidez quedan fuera de estas ayudas.

Un total de 989 transportistas autónomos han solicitado las ayudas por abandono de actividad en 2021. Sin embargo, dado el presupuesto -9.690.000 euros- dedicado a este fin por el Ministerio de Transportes, sólo 318 transportistas autónomos han sido beneficiarios de esta ayuda individual valorada en 30.000 euros. Por su parte, 497 solicitudes han sido desestimadas por agotamiento del crédito y otras 175 no han cumplido con los requisitos legales y formales para optar a estas ayudas. Ahora, el Ministerio ha abierto el plazo de alegaciones, que cuenta con un presupuesto extraído del total de 150.000 euros

Aunque el plazo de alegaciones puede servir para responder positivamente a un total de cinco recursos estimatorios dado el importe de cada ayuda individual y el presupuesto reservado, en términos globales estas ayudas se antojan insuficientes. De hecho, la cantidad destinada a esta línea de ayudas por abandono de la actividad es un 0,92% menor que la destinada en 2020 dentro del global de los Presupuestos Generales del Estado. Como consecuencia de este dato, el 60% de los transportistas autónomos ha quedado fuera de las mismas.

Si bien las cifras no son muy distintas a las de los dos anteriores ejercicios, desde FENADISMER se insta al Gobierno a que, ante las graves dificultades de los transportistas durante el último año por la pandemia de COVID-19 y los históricos problemas que arrastra el sector, se incremente el presupuesto de esta línea de ayudas con un fin social, siempre pensando en el objetivo de posibilitar un retiro digno a los transportistas de edad más avanzada o que tienen una situación de invalidez.