El tráfico de mercancías por carretera entre la Unión Europea y Reino Unido se ha complicado en gran medida desde la puesta en marcha ‘Brexit’, toda vez que los controles impuestos por el Ejecutivo británico son cada vez más exigentes. Sin embargo, el inicio de año dibuja problemas nuevos, toda vez que la Fuerza Fronteriza y la DVLA de Reino Unido han realizado una jornada de huelga para protestar por sus condiciones laborales. Esto ha provocado grandes atascos en los principales puestos fronterizos del país.
La Fuerza Fronteriza y la DVLA han protagonizado una huelga de 24 horas que comenzó a las 07:00 horas del miércoles y que se ha extendido hasta la misma hora de este jueves. Un paro que en el caso de la Fuerza Fronteriza ha afectado a las llegadas de carácter internacional, en todos los puertos aéreos y marítimos de Reino Unido. Tampoco se han librado de los atascos los transportista que viajaban a Reino Unido desde Calais, Dunkerque y Coquelles, en el norte de Francia.
Pese a tener un supuesto plan de contingencia, las declaraciones del Gobierno de Reino Unido poco más que han pedido a los transportistas paciencia y que estén preparados para posibles retrasos en sus habituales rutas y colas más largas en los puertos e instalaciones fronterizas interiores. A su vez, el Ejecutivo ha pedido a los operadores de transporte y empresas del sector que planifiquen sus viajes para intentar minimizar las interrupciones y los retrasos en la frontera.
En ese sentido, la DVLA también se ha unido a la huelga, lo que afecta a otra cuestión asociada al transporte como son las pruebas anuales a camiones, remolques, autobuses y autocares. A su vez, durante esta jornada también se han visto afectados los exámenes de Homologación Individual de Vehículos y los del Certificado de Aptitud Inicial. Ante un seguimiento de la huelga menor en esta actividad, el consejo oficial del Gobierno ha sido acudir a las ITV y centros de control según lo planeado en las citas previas.