Las protestas de la industria y el sector del transporte de mercancías por carretera alemán no han servido de nada. El Parlamento germano ha aprobado el proyecto de ley que permite la reforma de los peajes a camiones en el país, modificación que contempla una importante subida en el canon que pagan los vehículos pesados de transporte. Esta ley entrará en vigor el 1 de diciembre de 2023 y provocará que los vehículos industriales Euro 6 paguen casi un 85% más en los peajes de Alemania.

De los 19 céntimos por kilómetro se pasará a los 34,8 céntimos. Este es el resumen más claro de lo que supone este nuevo proyecto de ley para reformar los peajes a camiones. Una subida que desde el primer momento se ha justificado desde la reducción de las emisiones de CO2, si bien al final hasta los vehículos menos contaminantes sufrirán esta subida del canon. Al final, la subida de los precios de los peajes nace de un recargo de CO2 de 200 euros por tonelada emitida de este gas contaminante.

En este sentido, los camiones de cero emisiones estarán exentos de peaje hasta finales de 2025. Después de eso, solo pagarán el 25% del peaje regular por costos de infraestructura, sin tener que pagar la parte proporcional del peaje por ruido y contaminación del aire. Por su parte, los vehículos de GNL y GNC pagarán lo mismo que un camión Diésel convencional a partir del 1 de enero de 2024. A su vez, los vehículos Euro 6 Diésel pagarán casi un 85% más que bajo el actual modelo de peajes.

Escenario en el que además el límite de peso del peaje se reducirá hasta las 3,5 toneladas de MMA a partir del 1 de julio de 2024, por lo que los vehículos comerciales también estarán sujetos a este nuevo peaje. Se generará así ingresos adicionales por valor de 30.000 millones de euros hasta 2027, importe que en gran medida se invertirá en otros medios de transportes para conseguir la multimodalidad. Una vez más, el ferrocarril será beneficiado por este aumento de los costes para el transporte por carretera.