Pues eso, esa es la incidencia del aumento de los precios del transporte acaecido y que los medios del sector saludan a bombo y platillo, como un gran éxito económico para el sector.
Miren saben Uds. lo de las pensiones tan de moda estos días, pues igual, sea el porcentaje que sea sobre NADA el resultado es NADA.
En una coyuntura donde faltan los camiones por doquier, donde no hay conductores y los que hay están en subasta continúa, resulta que aumenta un 10% el volumen de transporte y su repercusión es del 1,40%. Aquí hay algo que no cuadra, no creen.
Se está dando pábulo a la mejora del transporte, pero lo cierto es que las dificultades son cada vez mayores, y ni aun así es el sector capaz de imponer su criterio, que no su fuerza que para todos sería mejor que no la use, y mientras tanto los llamados “clientes” que no se bajan de su pedestal, y ello pese a que tienen mejor información de lo que está ocurriendo que el propio sector.
Si con estas circunstancias tan adversas el sector no es capaz de imponerse, nunca, absolutamente nunca, lo hará para su desgracia, evidentemente.